Los altos mandos deben asegurarse de modernizar los flujos de trabajo, promoviendo la innovación constante en la organización.
La era digital ha ejercido gran influencia en la forma de gestionar las corporaciones. De acuerdo a predicciones del la International Data Corporation (IDC), para el año 2021 al menos el 50% del PIB se digitalizará y el crecimiento estará impulsado por nuevas ofertas, operaciones y relaciones.
Hoy, las empresas cada vez más se ayudan de tecnologías que, en conjunto con las personas y los procesos adecuados, resultan fundamentales para alcanzar los objetivos principales, como obtener mayores ingresos, reducir gastos y ofrecer una mejor experiencia para clientes y empleados.
La nueva fuerza laboral, así como la creciente base de consumidores, está conformada por generaciones jóvenes acostumbradas a concentrar su atención en los dispositivos y las aplicaciones móviles. Para llegar a ellos, se deben desarrollar las herramientas adecuadas para crear una interacción amigable, tanto en el trabajo como en la prestación de servicios u oferta de productos.
Es por esta razón que las organizaciones están enfocadas en elevar sus estándares e indicadores de desempeño basados en la experiencia. Tal es el caso del Net Promoter Score (NPS), una métrica que cada vez se considera más dentro de los objetivos generales y que estudia el comportamiento de los clientes, su actitud de compra y las recomendaciones que hacen de una marca.
Lo que todo líder debe hacer
Innovar, modernizar y transformar los flujos de trabajo a través de la automatización de servicios y procesos, son algunas de las prioridades que un CEO debe tener en cuenta para lograr la evolución de cualquier organización. Ante la globalización y la creciente competitividad, una mayor eficiencia se traduce en la capacidad de tomar decisiones estratégicas en tiempo real, permitiendo que la empresa esté a la altura de competidores locales y de grandes corporaciones globales.
Para lograr un cambio que verdaderamente sea un motor para la obtención de resultados positivos, hay que evitar tareas repetitivas y manuales que representan tanto pérdida de tiempo para los empleados como mermas económicas para la corporación.
La tecnología ocupa un papel fundamental en la transformación digital de todos los procesos y una plataforma integral de gestión en la nube es la base para conducirla de manera adecuada, ofreciendo una mejor experiencia de usuario (CX), así como integración y comunicación más eficaces.
Actualmente el 52% de las empresas eligen la nube para sus aplicaciones de negocio, pero este porcentaje va en aumento1.
Ofrecer una CX excelente para los clientes, empleados y todos los involucrados en las actividades empresariales es determinante. Mediante un servicio único y oportuno a través de los dispositivos adecuados y con un diseño atractivo, se fomenta el compromiso en los miembros de la organización y motiva nuevas formas de hacer las cosas, aumentando la productividad hasta en tres dígitos en poco tiempo.
La transición digital hacia nuevos modelos de negocio debe ser liderada por los altos ejecutivos quienes, compartiendo una visión enfocada a la transformación constante, impulsarán a adoptar los cambios y nuevas tecnologías.
De esta manera, el CEO necesita considerar siempre las premisas de la administración del cambio organizacional y prestar especial atención a la CX que involucra no sólo a clientes, sino también a los colaboradores. Por último, si bien las soluciones tecnológicas deben dejarse en manos de los expertos, los líderes deben asegurarse de que la plataforma de gestión empresarial promueva la innovación constante y motive el cumplimiento de los objetivos.
Referencias:
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