La propuesta de la firma mexicana Fr-ee busca albergar la idea original de Elon Musk al competir con otros 34 finalistas.
18/05/17 | Por Noticias TNE
De seis horas en coche a 47 minutos en una cápsula que se mueva a velocidades casi supersónicas. Ese es el tiempo que se podría recortar de un viaje entre Guadalajara y la Ciudad de México a mil 200 kilómetros por hora si resulta elegido entre los 35 finalistas que actualmente lo disputan.
El proyecto del despacho dirigido por Fernando Romero fue el único mexicano en entrar al Hyperloop One Global Challenge en 2015 y junto al Buenos Aires-Córdoba son las únicas propuestas latinoamericanas que quedan en competencia de entre más de 2,600 diseños inscritos inicialmente.
“Las principales ventajas son la economía del costo operativo y de construcción, así como una enorme seguridad”, dijo Romero al diario Reforma “un jurado especializado la ha seleccionado porque consideró que tiene capacidad de volverse real”.
El proyecto también incluye paradas en Querétaro y León.
El certamen invitaba a equipos de todas partes del mundo a presentar sus casos enfocándose en cuatro aspectos: comercial, de transporte, económico y político para sugerir por qué su ruta debería ser elegida como la primera red de Hyperloop.
Diecisiete países son representados entre los 35 participantes que quedan, de los cuales once pertenecen a Estados Unidos, cinco a la India y cuatro al Reino Unido. Otros diseños finalistas incluyen Sidney-Melbourne, Londres-Edimburgo, Miami-Orlando y Mumbai-Delhi.
“Hyperloop One busca colaborar con los candidatos que mejor desarrollen su caso de cómo no solo cambiaría la manera en que pasajeros y cargamento se transportarían en sus locaciones, sino también cómo mejoraría el crecimiento económico, generaría oportunidades de desarrollo y crearía nuevas oportunidades para que la gente pudiera vivir, trabajar y estar donde sea”, anuncia el sitio web del concurso.
Primer intento, un éxito
La tecnología requiere de la construcción de tubos de baja presión para disminuir la resistencia al aire y las cápsulas de pasajeros viajan levitando magnéticamente sobre un riel lo cual minimiza la fricción.
Con el fin de comenzar a comercializar exitosamente el programa, el equipo de Hyperloop realizó pruebas en el desierto de Nevada en mayo de 2016. En ésta, una pequeña cápsula de prueba aceleró de 0 a 187 km/h en 1.1 segundos. Este año, la compañía pretende realizar su primera prueba real en el mismo sitio.
“Tiene el potencial de resolver muchos de los problemas de transporte de largas distancias”, dijo Gregory Hodkinson del consorcio de ingenieros Arup Group. “Si el ferrocarril ayudó en crear la revolución industrial, éste tiene el potencial de hacer lo mismo para la economía de la información, creando conexiones entre personas, lugares, ideas y oportunidades”.
