Por Noticias TNE
La empresa invitó a familias disfrazadas a convivir alrededor de sus vehículos estacionados para probar sus funcionalidades y mejorarlas.
Google aprovecha toda oportunidad para que sus dispositivos continúen aprendiendo y en esta época de Halloween no iba a ser la excepción.
El pasado fin de semana, la empresa parte de Alphabet aprovechó la festividad de la noche de brujas y probó la capacidad de los sensores en sus coches autónomos.
Google sacó a las calles de Mountain View sus driverless cars para probar con los niños que ahí residen y dejarlo que jugarán alrededor de ellos, ya que la empresa está consciente que los infantes son mucho más impredecibles y pueden tener menos cuidado que los adultos.
Mediante una entrada de su blog, Google afirmó que gracias a esta dinámica los coches pudieron aplicar una característica de aprendizaje extra, reconociendo a niños mientras éstos utilizan un disfraz, lo cual podría ser un poco más complicado.
“Esta semana muchos pequeños superhéroes y robots estuvieron corriendo por Google con sus familias, así que les pedimos que estuvieran cerca de nuestros coches estacionados. Esto les da a nuestros sensores y software extra practica para reconocer niños en formas y tamaños únicos, a pesar de que estuvieran en extraños disfraces” destacó la empresa.
Los investigadores de Google lograron que los sensores al detectar que hay un niño a su alrededor, el coche autónomo se volviera mucho más precavido.
Ante esto, el gigante del Internet también declaró que los niños suelen tener movimiento más bruscos y arriesgados, como no caminar por la banqueta o cruzar calles sin mirar, etc. aumentando considerablemente el peligro de sufrir un percance.
En julio del 2015, los driverless cars de Google estuvieron involucrados en un total de 23 accidentes menores ya que se percibió que los vehículos aún no poseían respuestas orgánicas. Para aterrizar esta problemática, Google incorporó un toque humano en sus sistemas de inteligencia artificial.