Las escuelas enfrentan el desafío de ser más competitivas mientras los maestros buscan la forma de lograr que los alumnos asimilen mejor los conocimientos con el apoyo de la tecnología.
¿Alguna vez pensaste que no eras bueno para las matemáticas? ¿Llegaste a considerar que si hubieras tenido otro maestro o más tiempo para estudiarlas habrías sido mejor en esta materia? Desafortunadamente la enseñanza funciona bajo un modelo “uno para todos”; sin embargo, la inteligencia artificial (IA) puede ser la tecnología que revolucione la educación, impulsando el aprendizaje a otros niveles a pesar de las diferencias entre los alumnos.
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La IA cuenta con el potencial de irrumpir en el ámbito educativo; de hecho, el 99.4% de las instituciones académicas en Estados Unidos la ven como una herramienta esencial para su competitividad en los próximos tres años1. Esto no sólo porque les permitirá mejorar el desempeño de los estudiantes, sino también permitirá capacitar a la fuerza laboral del futuro, además de acelerar la innovación.
Al modernizar el aprendizaje a través de la inteligencia artificial se pueden personalizar los programas educativos, generar mayor inclusión entre alumnos que cuentan con distintos estilos de aprendizaje. Por supuesto, sin dejar atrás el apoyo en soluciones como la realidad virtual y aumentada, entre otras herramientas que contribuyan a impulsar las aulas inteligentes, teniendo como resultado que cada materia sea más divertida y atractiva.
Innovación que enriquece la enseñanza
Si bien podría decirse que la implementación de la IA en el ámbito educativo apenas se encuentra en sus fases iniciales, no cabe duda de que ha traído una transformación significativa con aportaciones únicas. Las instituciones que la han implementado han conseguido aumentar su valor económico, incrementar su productividad y de paso tener pupilos ávidos de conocimiento, ya que las materias dejan de ser aburridas.
La forma de aprender de las personas varía según su edad, género, etnicidad y bagaje cultural, entre otros factores que inciden en el proceso de desarrollo. Por ejemplo, los hombres consiguen puntajes más altos en pensamiento lógico, mientras que las mujeres son más abstractas, basan su experiencia en sensaciones y emociones2. ¿Qué tal ajustar las materias según las capacidades de cada persona?
La inteligencia artificial puede analizar información sobre cada estudiante con el fin de brindar retroalimentación y adecuar los contenidos de las clases según su género, fortalezas y aptitudes.
Habrá quienes sean mejores aprendiendo a través de libros de texto, pero al mismo tiempo una herramienta tecnológica transforma el contenido en audio o video interactivo para ayudar a quienes asimilan las cosas de forma auditiva o visual, según sea el caso.
Por otro lado, la IA pude apoyar en detectar a aquellos estudiantes que se están rezagando en alguna asignatura, ya sea porque muestran señales de alguna discapacidad cognitiva o simplemente se han quedado atrás. De esta manera los profesores podrán tomar las medidas pertinentes para apoyarlos y brindarles asesorías; esto sin olvidar que hay niños que por pena a veces no levantan la mano, pero luego batallan para contestar alguna pregunta en el examen.
Inclusive la inteligencia artificial libera de trabajo al profesor titular y se convierte en un tutor que brinda apoyo a los alumnos, asesorándolos con sus tareas y preparando los materiales para la siguiente clase. Por ejemplo, está el caso de CENTURY, una plataforma que monitorea el avance de los estudiantes e identifica fortalezas y áreas de oportunidad, lo que le permite al profesor planear mejor sus clases, al tiempo en que ahorra seis horas a la semana en planeación, tareas y generación de reportes3, entre otras actividades.
¿Cuántas veces hemos escuchado que los conocimientos se vuelven obsoletos en cuestión de años? Para los maestros es difícil mantener el ritmo ante los diferentes cambios de contenidos. Por ello, la IA, con el apoyo de la analítica, ayuda a identificar tendencias con la intención de asistir a los profesores en el diseño de materiales y una experiencia más enriquecedora dentro del salón de clases, sin dejar de lado el impacto de la transformación digital dentro del aula.
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Otro de los beneficios de la IA en las escuelas, es que apoya a que el sistema de aprendizaje cuente con un estándar parecido en diferentes partes del mundo, lo que a su vez permite generar condiciones de igualdad y garantizar un aprendizaje similar a estudiantes de países más desarrollados. Al mismo tiempo, se cuenta con más fuentes de información para mejorar el desempeño de los sistemas inteligentes.
Los datos también juegan un rol crucial en la educación, porque con el apoyo de la inteligencia artificial y el machine learning pueden ayudar a predecir el futuro académico, por lo tanto, sería posible determinar cuál sería la carrera profesional más adecuada para el estudiante. De igual manera, las autoridades educativas de cada país estarían al tanto de cuántos alumnos avanzarán al siguiente nivel (primaria, secundaria, preparatoria…) y de esta manera tener una idea de cómo planear mejor la inserción laboral.
Aprendizaje en las empresas
La educación no se limita a las escuelas, las organizaciones también deben encontrar la forma de integrar la inteligencia artificial en sus programas de capacitación. De esta manera elevarán el engagement de los colaboradores, atraerán y retendrán más talento. Por ello, deben apoyarse en esta tecnología para diseñar currículums que se ajusten a los estilos y perfil de cada empleado para ayudarlos a asimilar nuevos conocimientos y adquirir habilidades en aras de que logren mayor eficiencia y enfoque en sus actividades.
Los salones inteligentes, apoyados en tecnologías exponenciales como la IA, deberán ser la norma si se aspira a que los aprendices, tanto en las instituciones educativas como en las compañías, se vuelvan más competitivos en un mundo que acelera el paso y exige una capacidad de adaptación más veloz.
¿La inteligencia artificial transformará la educación de una vez por todas?
Referencias: 1IDC (2020): “Future-Ready Institutions: Asessing U.S. Higher Education Sector’s AI Adoption and Capabilities”. 2Davenport, J. (1986). “Learning style and its relationship to gender and age among elderhostel participants”. 3Becoming Human: Artificial Intelligence Magazine
Inteligencia artificial en el aula:
► Happy Numbers: ofrece a los estudiantes tutorías uno a uno en matemáticas. Alumnos de Estados Unidos han resuelto 30 millones de ejercicios gracias a esta plataforma.
► UTIFEN: promueve el aprendizaje móvil en Níger, África, mediante la IA ajusta las actividades acorde a las necesidades y habilidades de los niños.
►Hubert: chatbot que recolecta información cuando conversa con alumnos, posteriormente el maestro la analiza para determinar cómo puede mejorar la enseñanza de su materia.
► Cram101: servicio que fragmenta el contenido de los libros en resúmenes, tarjetas flash, formatos de opción múltiple, entre otros, para que el estudio sea más amigable y ameno.
► Netex Learning: permite a los educadores diseñar el programa curricular de tal manera que sea compatible entre diferentes dispositivos, integrando video y audio.
