04/02/17 | Por Noticias TNE
Son cinco mil unidades las que tienen que entregarse a los ganadores. ¿Cómo hacerlo en un país que cuenta con recursos naturales limitados?
El comité organizador de Tokio 2020 espera que las preseas sean elaboradas a partir de dispositivos electrónicos desechados. Cabe destacar que estos contienen metales valiosos, como oro y plata.
Por lo anterior, se lanzó el desafío a los ciudadanos japoneses para lograr reusar ocho toneladas de aparatos viejos. Se espera que con esta cantidad se consiga el suficiente oro para producir cinco mil medallas, que son las requeridas para entregar a los ganadores, tanto para los juegos Olímpicos como en los Paralímpicos.
“Un proyecto que permite a la población japonesa participar en la elaboración de las medallas es muy bueno”, comentó Koji Murofushi, director de deportes de Tokio 2020. “Hay un número de recursos limitados en la Tierra, así que el reciclaje de estos objetos nos hará pensar sobre el medio ambiente”.
En alianza con la empresa NTT Docomo, la más grande de telecomunicaciones en el país asiático y el Japan Environmental Sanitation Center, colaborarán para reunir los artefactos. Los usuarios podrán depositarlos en los centros de recolección ubicados en las dos mil 400 tiendas existentes en Japón.
Si bien en justas olímpicas anteriores se han reciclado desperdicios electrónicos, en Tokio 2020 —se afirma— serán las primeras medallas de oro fabricadas completamente a partir de metales recuperados.
Vale la pena considerar que no se requiere tanto oro para elaborarlas; por ejemplo, las de Río de Janeiro apenas contenían .2 onzas del metal cada una; con base en la misma composición, el total de las de Tokio requerían alrededor de 28 kg.
“Cuando un atleta en Tokio gane una medalla, su peso no vendrá del oro, la plata o el bronce, sino de una nación”, expresó Ashton Eaton, exdeportista olímpico, al Japan Times.
Japón es un país que no cuenta con muchos recursos naturales, pero a pesar de ello, el oro y la plata que contienen sus electrónicos, de acuerdo a un reporte de Nikkei, es equivalente al 16% del 22% de las reservas internacionales, sobrepasando a cualquier país con recursos abundantes.