Gobierno de Estados Unidos se reunirá con 30 países para dialogar y proponer rutas de acción a fin de combatir el secuestro de información. Rusia no participará al no ser invitada.
La Casa Blanca llevará a cabo este miércoles y jueves una cumbre mundial para proponer estrategias enfocadas a combatir el ransomware y eliminar ‘paraísos’ donde los criminales están seguros. México se encuentra entre los 30 invitados, pero llama la atención que Rusia no formará parte del diálogo.
“Vemos esta reunión como la primera de muchas conversaciones [entre aliados]” comentó un oficial del gobierno de EE. UU., quien pidió no ser nombrado, esto como parte del acuerdo para una entrevista con NBC News.
La administración encabezada por Joe Biden busca integrar una coalición internacional para detener los ciberataques de secuestro de información, sin depender del Kremlin.
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El grupo que participará en la cumbre mundial virtual de ransomware es un reflejo del carácter transnacional y pernicioso de este problema. Entre los países presentes se encuentran: México, Australia, Brasil, Bulgaria, Canadá, Corea del Sur, Emiratos Árabes Unidos, Estonia, India, Irlanda, Israel, Italia, Japón, Kenia, Lituania, Nigeria, Nueva Zelanda, Países Bajos, Polonia, Reino Unido, República Checa, República Dominicana, Rumania, Singapur, Sudáfrica, Suecia, Suiza, Ucrania y la Unión Europea.
A pesar de que no están claros los objetivos concretos que busca Estados Unidos en dicha reunión, esta se enfocará en cuatro áreas particulares: resiliencia nacional, combate a financiamiento ilícito, disrupción y aplicación de la ley, y diplomacia.
¿Por qué Rusia queda fuera?
El gobierno liderado por Vladimir Putin ha sido señalado en diversas ocasiones por proteger a las bandas de hackers detrás de diversos ciberataques. Tal es el caso de lo ocurrido en Estados Unidos con la falla en los ductos de combustible de Colonial Pipeline y JBS Foods, el proveedor de carne más grande el mundo, incidentes atribuidos a Darkside y REvil.
Por otro lado, las autoridades rusas no extraditan a sus ciudadanos y se han mostrado renuentes a desmantelar las bandas de cibercriminales que atetan contra países extranjeros.

Adicionalmente, Joe Biden le dijo Putin en una reunión el pasado mes de junio que los ataques dirigidos a la infraestructura crítica de Estados Unidos eran intolerables. Desde entonces, la Casa Blanca fue tajante al expresar que tomarán meses antes de ver si dichas conversaciones generarán resultados efectivos.
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A pesar de lo anterior, Estados Unidos mantiene conversaciones directas con Rusia respecto al tema, aunque este país no participe en le cumbre mundial de ransomware. “Buscamos con el gobierno ruso atender esta actividad criminal proveniente de grupos que operan dentro de Rusia”, agregó el oficial.