El país se encuentra en la ruta tecnológica, pero aún se requiere de una mayor sinergia entre gobierno y empresas para aprovechar la Industria 4.0.
30/11/18 | Por Noticias TNE
La Revolución Industrial 4.0 no es diferente a otras en el sentido de que ofrecen oportunidades de crecimiento y desarrollo a los países que de manera rápida adopten las nuevas tecnologías, donde las empresas integren una plantilla de colaboradores que cuenten con las capacidades y conocimientos para desempeñarse de manera óptima y productiva.
En este último punto es donde México enfrenta un enorme reto, así lo sugiere el estudio Inteligencia artificial y crecimiento económico. Oportunidades y desafíos para México, elaborado por el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC). Por ello, el gobierno debe jugar un papel fundamental con el objetivo de promover la adopción tecnológica y proponer una ruta de acción que contribuya a actualizar y capacitar a la fuerza laboral.
Los antecedentes de la economía azteca, partiendo de la década de 1980, reflejan una disminución del bienestar de los ciudadanos. Esta situación se ve afectada debido a una falta de iniciativa enfocada a aprovechar las tecnologías e innovar, este último esencial para desarrollar nuevas ideas que se reflejen en productos y servicios novedosos.
La investigación destaca dos motivos principales por los que la integración de la Inteligencia Artificial (IA) es una oportunidad para México: primero, la revolución tecnológica a pesar de que ya lleva unos años en marcha, hasta ahora es cuando se sabe que la IA puede contribuir a incrementar la productividad de la economía. En segundo lugar, actuar oportunamente a fin de incorporarla reporta considerables beneficios.
“En su conjunto, la adopción, la calidad de la infraestructura digital y las instituciones, así como la innovación definen la competitividad digital de un país”, comentó Bhaskar Chakravorti, de The Fletcher School en Tufts University. “Los gobiernos y las empresas desempeñan un papel vital como guías del progreso de las naciones”.
Entre las sugerencias que menciona la investigación para que México se ponga en ruta de la adopción la inteligencia artificial se encuentra la elaboración de un plan estratégico similar al que dio a conocer Alemania, que inició su programa de “Industria 4.0” en 2013. Luego le siguieron el plan “China 2025”, el “Advanced Manufacturing” en Estados Unidos, “Smart Industry” en Suecia. Estos esquemas llevan reestructurar a la industria a fin de que esté más integrada y conectada, además de que sea más flexible y colaborativa.
La segunda recomendación va enfocada a invertir en el talento debido a que habrá tareas que serán realizadas por máquinas, mientras que otras serán complementadas por el expertise de colaboradores que dominen ciertos conocimientos y habilidades en determinadas áreas. Se deberá enfatizar el desarrollo de cualidades como el manejo de entornos complejos, creatividad e inteligencia social.
“México tiene una oportunidad por delante. (…) De romper con su trayectoria pasada y acelerar el ritmo de adopción de tecnologías asociadas a IA, la tasa de crecimiento mexicana podría acelerarse en más de un punto porcentual por año durante la próxima década”, concluye el estudio.
La integración de la IA y las nuevas tecnologías no sucederá de la noche a la mañana; al contrario, se requieren de políticas públicas concretas que, como ya se mencionó anteriormente, busquen fortalecer a la industria y a desarrollar al capital humano del futuro; así como una adecuada seguridad social para quienes enfrenten dificultades a la hora de adaptarse e integrarse al mercado laboral.
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