10/02/2016 | Por Noticias TNE
Reglamento federal de Estados Unidos otorga aval legal que facilitará la comercialización de estos vehículos.
Para la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras de Estados Unidos (NHTSA, por sus siglas en inglés), el software que maneja los vehículos autónomos de Google ya se considera un conductor legal que puede transitar por las calles del país.
Esta decisión, dada a conocer a través de una carta, abre las puertas para que la firma de Alphabet y otras que están desarrollando coches driverless puedan en un futuro no tan lejano comercializar sin trabas legales sus automóviles.
“La NHTSA interpretará ‘conductor’ en el contexto del diseño de vehículo automotor descrito por Google según alude al SDS (sistema de conducción autónoma) y no a ninguno de los ocupantes del vehículo” señaló Paul Hemmersbaugh, director del equipo legal de la agencia estadounidense.
En los últimos meses, la empresa de Mountain View había enviado constantes cartas a la NHTSA solicitando una reinterpretación de las normas de seguridad con el fin de facilitar la distribución pública de sus prototipos de vehículos autoconducibles.
A pesar del avance legal que representa este anuncio, Google y otros fabricantes aún tendrán que sortear otras barreras como el requisito federal de que por seguridad todos los automóviles deberán contar con frenos de pie y mano. Ante esto, la mega empresa del Internet ha replicado que estos requisitos no son necesarios porque el software que se incluye en sus vehículos es un conductor electrónico que puede frenar.
“En varias instancias sería posible que Google demostrara que determinadas normas federales no son necesarias para el diseño de un vehículo particular, pero hasta la fecha, no ha concretado tal demostración” destacó Hemmersbaugh.
“La siguiente pregunta es cómo podrá certificar que el sistema de conducción autónoma cumple con un estándar desarrollado y diseñado para aplicarse a un vehículo con un conductor humano”.
Tras el anuncio, el Mega Buscador aún no ha emitido reacciones, pero se espera que se apoye en algún fabricante de automóviles para construir sus coches driverless sin fallar en temas de seguridad tradicionales.