Por Carlos Treviño Gutiérrez
Contrario a lo que se cree, las barreras pueden representar una buena oportunidad para superarnos y mostrarnos el camino hacia dónde debemos movernos para lograr nuestros objetivos y salir adelante.
Escucho todo el tiempo a gente quejándose por lo difícil de la situación actual, cuando les pregunto cómo va su negocio o su trabajo, unos culpan al gobierno, otros a la competencia desleal, a los bancos, unos más a los empleados y así sigue la lista de causas mencionadas. No es una sorpresa que la economía cambie, ni que sucedan cosas inesperadas que hagan difícil sacar adelante la empresa. Sin embargo, durante esos tiempos hay algunos empresarios que crecen más por las acciones que toman: planeación, educación, entrenamiento, mercadotecnia efectiva, servicio al cliente y más.
Si tú decides cruzar las barreras que se te presenten, encontrarás muchas herramientas para ayudarte a lograrlo. Pregúntate honestamente: ¿podría estar haciendo más para promocionar mi negocio? Si la respuesta es sí, entonces tu mayor reto es la ignorancia.
Cuando las dificultades crecen, es decir, si el negocio está cayendo, es una magnífica oportunidad para hacer lo que otros no hacen: invertir mejor, y por invertir nos referimos a las alternativas que se adoptan para resolver situaciones críticas, alternativas a nivel estratégico que ponen a prueba tú capacidad de liderazgo y resiliencia. Recuerda que el éxito de tu empresa depende de las decisiones que tomas.
Entonces, ¿el éxito o fracaso de un negocio es resultado de las circunstancias externas, o es resultado del dueño del negocio?… te puedo apostar que no es resultado de las circunstancias externas.
He aquí algunas claves para crecer a través de las barreras que se te presenten:
– Conocimientos: Entre más expertise tengas, el negocio se vuelve más sencillo. Entre menos conocimientos tengas, el negocio se vuelve más difícil.
Excusas: ¿Estás buscando culpables?, ¿eres parte del problema? pueden no ser las circunstancias externas, ¡puedes ser tú!
– Habilidades: Las habilidades para manejar y mantener un negocio son diferentes de las habilidades que se requieren para crecer un negocio. Aunque hayas tenido mucho éxito en tu carrera corporativa, puede que te falten algunas habilidades requeridas para crecer un negocio pequeño.
– Diferencia: Un restaurante puede no tener comida diferente y única; es la experiencia y el servicio lo que lo puede diferenciar; cómo manejes un error puede incluso crear más lealtad del cliente.
Otro elemento de vital importancia, y que debemos tomar en cuenta para salir más rápido de las crisis a las cuales nos enfrentamos, tiene que ver con el elemento más importante de toda la cadena del negocio: el cliente. No importa que tan malos momentos estemos viviendo, es de suma importancia que nuestros situaciones no afecten la manera en que los consumidores nos perciben y que la calidad de la atención y servicio no disminuya bajo ninguna circunstancia.
Algunos puntos que debes tomar en cuenta a este respecto son:
– Lealtad del cliente: ¿Tienes un plan para la lealtad del cliente? es seis veces más fácil hacer que vuelva un cliente antiguo que traer uno nuevo, hay que enfocarse en traer clientes de la manera fácil.
– Equipo: Tu mejor talento es tu carta de presentación. Enséñales cómo agregar a la venta y cómo manejar a los clientes.
– Conocimiento del cliente: Obtén retroalimentación de tus clientes. Encuentra lo que puedes mejorar. Mantente en contacto con ellos y obtén información valiosa. No es lo que haces por ellos, sino cómo los haces sentir.
– Responsabilidad: Puede no ser lo externo, podrías ser tú. No culpes a lo que está fuera de tu control.
– Plan: Ten un plan para dar un servicio de buena calidad, entrenamiento y soporte al equipo. Este lo llevará a cabo con el tiempo. La falta de un plan puede ser falta de conocimientos.
Piensa un momento, busca respuestas a las barreras que se te presentan día a día, encuentra la mejor forma de resolverlas y verás como tu negocio crecerá y será más sencillo.