Después de darse a conocer el ataque al SPEI a finales de abril, dos reconocidos bancos dan a conocer la cantidad de dinero pérdida. De acuerdo a investigadores, los fondos transferidos se encuentran dentro del país.
14/05/18 | Por Noticias TNE
Tras los ataques cibernéticos realizados durante los últimos días de abril, organismos e instituciones financieras todavía se encuentran cuantificando la suma de dinero que fue sustraída de diversas cuentas del sistema financiero mexicano, hasta el momento se contabilizaron 400 millones de pesos.
Banorte, el único banco que hasta ahora se ha pronunciado públicamente al respecto, reportó una pérdida de 150 mdp, además de precisar que ninguno de sus clientes sufrió las consecuencias del incidente. Por su parte, del Banco del Bajío se estima un afectación por alrededor de 160 mdp; lo anterior de acuerdo a lo publicado por El Financiero.
El resto del dinero robado proviene de instituciones más pequeñas y aún se están llevando a cabo auditorías con el Indeval a fin de cotejar distintas transacciones bursátiles que se hicieron el pasado 27 de abril y no se concretaron.
Todavía no se identifican ni el origen del ataque cibernético ni las cuentas donde se depositaron los fondos robados. Debido a que las instituciones financieras vulneradas son de las más reconocidas a nivel nacional, no se descarta que la cantidad de dinero sustraído sea aún mayor.
Las autoridades afirman que el Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI) no fue afectado, sino que el cibertaque fue a través de los proveedores bancarios para conectarse al mismo. Tampoco se ha determinado el método de operación de los hackers, hecho que dificulta estimar el monto exacto robado, información que difícilmente podrá ser revelada por los establecimientos afectados u autoridades financieras.
Personas allegadas a las investigaciones consideran que las cuentas a donde se trasfirieron los fondos se encuentran en el interior del país debido a que a nivel internacional existen alertas dentro de las mismas instituciones.
Por su parte, Lorenza Martínez Trigueros, directora del Sistema de Pagos del Banco de México, detalló que las transacciones se harán de forma lenta. “Los problemas en el sistema SPEI son retrasos de 10 minutos porque los bancos los realizan en un canal más lento por (motivos de) seguridad”, declaró en entrevista con Radio Fórmula.
Banxico ha enfocado la investigación en cinco bancos después de que sus conexiones externas al sistema de pagos del banco central quedaron expuestas en un posible ataque cibernético, según explicó Martínez Trigueros. Dichas instituciones trabajan en conjunto con la Procuraduría General de la República para determinar si grupos criminales ayudaron a perpetrar los ataques.
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