Por Noticias TNE
El sensor que se encontrará dentro de una píldora de silicón grabará diferentes partes del tracto gastrointestinal.
Los médicos buscan constantemente nuevos métodos de monitorear los signos vitales de sus pacientes, hasta ahora los wearables son una de las mejores opciones, sin embargo puede ser algo incómodo llevarlos en todo momento.
Investigadores del MIT han creado una alternativa a esto que era imposible imaginar en algunos años, se trata de un dispositivo electrónico capaz de enviar señales desde adentro del cuerpo.
Este sensor del tamaño de una píldora multivitamínica podrá medir el ritmo cardíaco, temperatura corporal y respiración dentro del tracto gastrointestinal permitiendo diagnosticar de forma temprana enfermedades del corazón o respiratorias, así como tratar pacientes de traumatismo o con males crónicos.
Este dispositivo que además incluye un pequeño micrófono dentro de una cápsula de silicón, calcula la frecuencia cardíaca y la respiración por medio de las ondas de sonido producidas por los latidos del corazón, así como la inhalación y la exhalación de los pulmones, lo cual de acuerdo a los investigadores es una ventaja pues un mismo sensor sería capaz de registrar dos tipos de información muy importantes.
Los científicos también ven una gran posibilidad de que el dispositivo se popularice entre soldados heridos e incluso en el ámbito deportivo, pues ayudaría a formar mejor a los atletas profesionales y monitorear su estado médico constantemente.
Debido a que el sensor graba desde diferentes partes del tracto gastrointestinal, se producen ondas acústicas mucho más precisas y sin necesidad de tocar la piel del paciente o que tenga que usar incómodos aparatos exteriores.
Las señales que emite el sensor se enviarán a un receptor externo que deberá estar a 3 metros de distancia de la persona que ha ingerido la “píldora”, por lo que será necesario portar un arnés donde se coloque el monitor, el tiempo aproximado en el que tendrá que estar en el cuerpo es de 1 a 2 días.
Aunque esto sólo es el inicio, los médicos del MIT buscan a futuro diagnosticar enfermedades más complejas o detectar ritmos del corazón anormales que son derivadas de arritmias o problemas respiratorios como el asma o enfisema pulmonar.
A largo plazo esperan que estos sensores puedan estar dentro de los pacientes por mucho más tiempo e incluso tener la capacidad de suministrar medicamento para enfermos crónicos que deben tomarlo toda su vida.
“Esperamos que un día podamos detectar algunas moléculas o patógenos y deliberar el antibiótico adecuado, este desarrollo representa el origen de este tipo de sistemas para que los demás lo mejoren” afirmó Giovanni Traverso, científico afiliado a la investigación.