Dicen que todo depende del cristal con que se mire, así que obtén el máximo provecho del encierro para trabajar al máximo y hacer otras actividades que te llamen la atención.
Al igual que a otros, seguro te tocó hacer home office. De pronto sentiste como si te hubieran encomendado una misión a cumplir a pesar de los respectivos desafíos. Quizá no te gusta trabajar desde casa porque sientes que tienes muchas distracciones o eres de los que necesita el estímulo del ambiente laboral para realizar tus actividades.
A pesar de lo anterior, no tienes otras opciones, por disposición oficial tienes que mantenerte en encerrado por lo menos dos semanas. ¿Te imaginas cómo se sentirán quienes se encuentran prácticamente solos en alguno de los polos de la Tierra o los astronautas en la Estación Especial?
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Es cierto, podrás decir que ellos están en esa situación a sabiendas de que así sería, o como bien se dice, “sabían a lo que iban”. Sin embargo, quienes residen en el ártico o en el espacio, tienen valiosas lecciones para ti sobre cómo salir adelante en una situación de aislamiento.
Andy Thomas, astronauta australiano que estuvo en una estación espacial rusa durante 140 días, tuvo claro que hay dos aspectos importantes que debes tomar en cuenta cuando vas a estar mucho tiempo encerrado: alimentos e higiene.
Si bien vas a estar trabajando durante un horario regular, será muy tentador levantarte en las mañanas e iniciar labores, así como estás vestido, además de que existe la posibilidad de comer de más. Luego no te quejes por ese exceso de kilos.
Para evitar lo anterior, debes tener un plan con horarios definidos para comer, además de gestionar tus alimentos de forma correcta; es decir, comer sólo cuando no es necesario y no ceder a los antojos. Recuerda lo vital que es mantenerte concentrando en tus actividades. Claro, puedes tener algún aperitivo como pepino con limón y agua, pero no te levantes a cada rato para ir a la cocina.
Por otro lado, debes bañarte y arreglarte como si fueras a ir a la oficina, pero además para mantener una consistencia. No te sientes igual cuando hablas por teléfono en fachas, que al estar recién bañado. Imagina que se trata de clientes con los cuales estás cerca de cerrar un trato.
La experiencia de confinamiento se vuelve enriquecedora cuando administras correctamente tu tiempo. Piénsalo por un momento, si lo propones puedes trabajar más horas de forma concentrada porque no tienes que pensar en traslados.
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Lo anterior sugiere que tengas una rutina bien establecida. Al no tener que ir a la oficina, puedes iniciar tu día a las 5:00 am, ejercitarte, leer un libro, luego desayunar, y para las 7:00 am iniciar labores, incluso tomarte un breve descanso a media mañana y continuar hasta la hora de comida, para cerrar a las 19:00 horas. Piensa que puedes ser más efectivo si te lo propones, es cuestión de que te organices.
Al finalizar tu día, cuentas con la posibilidad de ir directo a realizar tu pasatiempo favorito: ejercicio, algún curso online, aprender a cocinar algún platillo que te llame la atención o ¿por qué no?, ver un episodio de esa serie que has postergado y antes no podías porque llegabas a tu casa hasta las 11 de la noche y seguías trabajando. Por supuesto, no abuses de quedarte sentado mirando la televisión.
Así que pon manos de la obra, enfócate en lo positivo que puedes obtener de una situación de aislamiento, como forjar nuevos hábitos para ser una mejor persona. Elige mantenerte optimista para sacarle el mejor provecho del aislamiento.
