28/03/2016 | Por Noticias TNE
La mayoría están relacionados con volar a alturas no permitidas; se prevén normas y castigos más estrictos.
Los aviones no tripulados se han convertido en un constante dolor de cabeza para las autoridades aéreas en Estados Unidos, debido a que las violaciones a los reglamentos son constantes, pero hasta el momento ninguno con graves consecuencias.
La Administración Federal de Aviación (FAA) informó que desde agosto de 2015 a enero de 2016 se han registrado 583 incidentes en donde los drones se han visto involucrados, la mayoría han sido aeronaves registradas por lo que sus propietarios han podido recibir una sanción por violar la ley; sin embargo, esta cifra pone sobre la mesa la realidad de que la seguridad en este tipo de artefactos debe ser más estrecha.
Los incidentes más comunes, de acuerdo al informe de la agencia estadounidense, son de drones que invaden el espacio aéreo restringido poniendo en alerta a las aerolíneas, las cuales han sido los mayores promotores de normas más estrictas, sobre todo después de que un avión no tripulado voló muy cerca de un avión en los alrededores del Aeropuerto JFK, en Nueva York.
El hecho más reciente se registro durante la primera quincena de marzo cuando un drone estuvo a punto de chocar con un avión comercial de Lufthansa que estaba por aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles y volaba a unos 1500 metros de altitud. Las normas de la FAA señalan que ninguna nave debe pasar los 122 metros de altura cuando están a menos de ocho kilómetros de una terminal aérea.
Otros problemas reportados con este tipo de artefactos se han dado en estadios durante conciertos o eventos deportivos y en prisiones, en donde se ha detectado que se acercan a las bardas o ventanas de las celdas para entregar paquetes a los presos.
La FAA señaló que aerolíneas, televisoras, empresas de seguridad de estadios y el departamento que administra las cárceles en EU están uniéndose para equiparse con “antidrones”, es decir aparatos, radares y/o sensores que les avisen cuando un avión no tripulado está violando su espacio aéreo, además de poder “leer” su registro para saber quién es el propietario y hasta poder destruirlo en ese momento, en caso de ser necesario.
Desde octubre de 2015 es necesario que todos los drones sean registrados en Estados Unidos y hasta la fecha se estima que hay poco más de un millón en regla.