Los resultados de la encuesta realizada por la UNESCO han motivado a la organización a impartir un nuevo curso en línea enfocado en enseñarles a los influencers a verificar rigurosamente la información que comparten en sus redes sociales.
A medida que los creadores de contenido digital o influencers se han convertido en una fuente de información cada vez más importante para las personas en la era de las redes sociales, una nueva encuesta de la UNESCO refleja que los usuarios deben ser más conscientes de la información que consumen en internet tras revelar que el 62% de los creadores de contenido no realizan una verificación rigurosa y sistemática de la información antes de compartirla en sus propias redes.
Audrey Azoulay, directora general de la UNESCO describió a la investigación titulada “Behind the Screens” que se traduce a “Detrás de las pantallas”, como el primer análisis mundial de las motivaciones y prácticas de los creadores de contenidos digitales, así como de los desafíos a los que estos se enfrentan. El informe se basó en una encuesta que fue aplicada a 500 influencers de 45 países entre agosto y septiembre de 2024.
¿Por qué los influencers no verifican la información?
El estudio de la UNESCO demuestra que generalmente los influencers no acostumbran consultar fuentes oficiales de información, como informes y documentos gubernamentales como parte de su proceso de creación de contenido.
Aproximadamente seis de cada diez participantes señalaron que toman sus propias experiencias personales como base y el 39% que recurre a sus propias investigaciones y entrevistas. Mientras tanto, solo el 35% nombró a las noticias tradicionales y a los sitios de medios como su fuente principal.
Adicionalmente, solo el 37% de los encuestados afirmó que utiliza herramientas de verificación como plataformas especializadas para revisar la información antes de compartirla.
Azoulay subrayó que la dependencia de estas métricas poco confiables, combinada con la falta de un proceso de evaluación crítico y riguroso de la información, expone a los usuarios en redes a riesgos de desinformación.
“Los influencers han ganado un papel sumamente relevante en la formación de opinión pública, pero su falta de preparación en verificación de datos representa un desafío significativo para el ecosistema informativo global”, afirmó la directora general de la UNESCO.
Priorizan popularidad sobre precisión
Los resultados de la encuesta reflejan que muchos influencers se basan en indicadores superficiales como la popularidad de las publicaciones para medir la credibilidad de las fuentes de información de donde obtienen datos para sus videos o historias.
Según la encuesta, el 42% de los participantes toma como referencia la cantidad de “me gusta”, así como las veces que ha sido compartida una publicación para evaluar su fiabilidad. Mientras tanto, el 21% se basa en recomendaciones de amigos cercanos y el 19% en la reputación de la fuente de información.
Por otro lado, el estudio también revela que el 59% de los creadores de contenido digital desconoce las regulaciones internacionales relacionadas con las comunicaciones digitales. Según la UNESCO, este vacío educativo no solo pone en riesgo la credibilidad de los influencers, sino que también los vuelve vulnerables a sanciones legales y ataques en línea.
Lo anterior se ve reflejado en el hecho de que a pesar de que casi el 40% de los encuestados declaró que han sido víctima de discursos de odio, apenas el 20% tomó medidas para denunciarlo a las plataformas digitales. Además, según la investigación, muchos desconocen sus derechos como creadores digitales, lo que les dificulta su capacidad para defenderse ante contenido malicioso o restringido.
La UNESCO ataca el problema con una nueva iniciativa
Durante la encuesta, el 73% de los participantes manifestó su interés por aprender a verificar información para mejorar la veracidad de sus contenidos, por lo que la UNESCO, en colaboración con el Centro Knight para el Periodismo en las Américas, lanzó un curso global diseñado específicamente para influencers.
Este programa de un mes de duración, tiene como objetivo capacitar a los creadores de contenido en áreas clave como la verificación de información, la identificación de desinformación y la promoción de transparencia en sus publicaciones. Además, con el curso la UNESCO busca construir una comunidad global de influencers comprometidos con la integridad informativa, promoviendo prácticas responsables que beneficien a sus seguidores.
Hasta ahora la reciente iniciativa de la UNESCO ha sido un éxito, ya que según el brazo de ciencia, educación y cultura de las Naciones Unidas, en sus primeros dos meses de disponibilidad, más de 9,000 personas de 160 países ya se han inscrito al programa formativo.
Finalmente, la UNESCO advirtió que la falta de verificación por parte de los influencers puede tener consecuencias significativas, especialmente en temas sensibles como política, salud pública y desastres naturales. Sin embargo, confía plenamente en que iniciativas como su curso ayudarán a fomentar prácticas responsables en el ámbito de la creación de contenido.