Conectar con los clientes, venderles lo que realmente necesitan en el momento adecuado y fortalecer la conexión con ellos, es un reto que las áreas de mercadotecnia enfrentan, pero que pueden resolver con la inteligencia artificial.
El mundo postpandemia exige a las marcas incrementar el engagement con los clientes a través de conexiones poderosas que eleven la intención de compra en medio de tanto de tanta competencia. Por lo tanto, la inteligencia artificial (IA) se vuelve una herramienta fundamental en el marketing postpandemia y más allá del 2021.
La IA, además de apoyar a las empresas —sin importar su tamaño— para promocionarse y lograr más eficiencia, puede ayudar a impulsar el social media listening, el lead nurturing, sin dejar de lado el contenido personalizado que generará un 20 % más oportunidades de ventas. No es para menos la necesidad de usar esta tecnología para potenciar la estrategia de marketing.
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No hay duda de que la crisis sanitaria modificó el comportamiento de los consumidores, obligando a las organizaciones a adaptarse para identificar y resolver sus necesidades con mayor velocidad. Por ello, la inteligencia artificial, a través de la analítica y los insights, permiten vender el producto correcto, al cliente indicado y en el momento preciso.
De lo que se trata es lograr que las campañas de marketing sean más eficientes para que los mensajes lleguen a los clientes de forma consistente a través de diferentes canales con la finalidad de que se interesen por los productos o servicios que se ofrecen. ¿Cómo será de utilidad la inteligencia artificial en el mundo postpandemia?
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Pronosticar ventas con mayor precisión
Atender y resolver las necesidades de los clientes es todo un desafío, sobre todo en circunstancias que cambian de un día para otro. Los equipos de mercadotecnia requieren comprender mejor a los consumidores con la finalidad de predecir qué comprarán.
De esta manera se facilitará el promover los productos adecuados, así como determinar las cantidades que se venderán. En consecuencia, será más fácil administrar los inventarios, así como evitar ofrecer mercancías que no están en existencia.
Por otro lado, con la ayuda de los insights es factible tomar decisiones centradas en los clientes. De igual forma, es más sencillo segmentar a los consumidores para definir estrategias que se centren en los perfiles adecuados y no perder tiempo ni recursos en aquellos que no están interesados en adquirir la oferta.
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Ofrecer experiencias personalizadas
Cada consumidor es único, por lo que requiere de contenidos específicos que apelen a sus emociones y necesidades particulares. Con la inteligencia artificial se maximiza la eficiencia al automatizar tareas específicas tales como el envío de correos, al igual que la curación de publicaciones en redes sociales.
Con la IA se puede analizar el historial de cada usuario y recomendar productos acordes a sus gustos y requerimientos a través de mensajes individualizados, incluidos los newsletter. A medida que esto sea más frecuente se logrará una mayor retención, que en estos momentos se vuelve crucial porque la competencia está que arde.
En términos de recomendaciones personalizadas, Amazon es por excelencia un buen ejemplo. Piensa en los libros, seguramente te ha pasado que al terminar de leer uno, el algoritmo te sugiere otros títulos acordes a tus intereses y que quizá jamás habrías escuchado de ellos o no nunca los hubieras encontrado en su formato físico.
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Potencializar el poder del reconocimiento de voz
Las marcas tendrán que impulsar sus estrategias publicitarias basadas según las intenciones de búsqueda e interacciones por voz a través de los dispositivos móviles. De esta manera, sabrán con mayor precisión qué buscan y cuáles pueden ser los productos que tienen el potencial de satisfacer sus necesidades.
Asistentes personales como Siri o Alexa, entre otros, son capaces de reconocer palabras habladas o convertirlas en texto para realizar determinadas acciones. Se estima que en el 55 % de los hogares habrá esta clase de dispositivos para el 20221. Esto abre puertas de oportunidad para que los equipos de marketing conozcan con más detalle qué buscan los clientes.
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Establecer precios dinámicos y competitivos
La oferta y la demanda de productos puede variar de un momento a otro, la inteligencia artificial resulta una gran aliada para definir precios en tiempo real. Es posible aumentarlos, aunque no parezca lo más adecuado e incluso no sea bien visto por los clientes, pero al final lo que se pretende es conseguir un mayor margen de ganancias.
Los consumidores se benefician de una estrategia como esta, especialmente cuando la demanda de los productos o servicios es baja. En concreto, las aplicaciones de viajes compartidos aumentan las tarifas a medida que se incrementa la demanda del servicio.
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Asegurar la calidad y privacidad de los datos
Los equipos de marketing requieren usar grandes cantidades de información para crear estrategias efectivas. Por lo tanto, la inteligencia artificial permite asegurar la calidad de esta, además de protegerla para evitar riesgos que pongan en jaque la reputación de la marca por no proteger los datos sensibles de los consumidores.
De la misma manera, es necesario que las empresas aseguren el cuidado de la información a fin de prevenir ataques cibernéticos. Por ejemplo, un ransomware que ponga en jaque la operación del negocio al perder datos que no necesariamente serán recuperados aun y cuando se pague el rescate.
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En una era postpandemia, las empresas que usen la inteligencia artificial en su estrategia de marketing para su beneficio estarán en posición no solo de incrementar las ventas, sino también de fortalecer la relación/conexión con los clientes.
Referencias: 1Mage Plaza
