17/08/2016 | Por Noticias TNE
Una encuesta realizada a 270 miembros de la comunidad científica revela cuáles son los desafíos que enfrenta.
Hoy en día es común leer artículos, sin importar el tema, que se sustentan en alguno —o varios— estudios. A primera instancia no parece existir algún problema. Pero el punto de vista puede variar si se toman en consideración otros factores; estos pueden referirse a los retos que enfrenta la ciencia en la actualidad.
El proceso científico aplicado de manera correcta es ideal: se establece una pregunta o hipótesis, un objetivo que se pone a prueba, y, por último, se experimenta para buscar una respuesta. A grandes rasgos, así es. De acuerdo a una encuesta realizada por The Vox a 270 personas allegadas a la ciencia, entre profesores, graduados, jefes de laboratorio, ésta se encuentra sometida a otros intereses.
La comunidad científica suele enriquecer el aprendizaje a través de los estudios que no son exitosos, pero estos pueden significar el fin de su carrera. Por el contrario, se dan incentivos para publicar resultados positivos.
Obstáculos que enfrenta la ciencia
El primer inconveniente con que se encuentra el mundo científico es el problema monetario. Los científicos requieren de una suma de dinero para llevar a buen puerto sus estudios, adquirir el equipo necesario y pagar a sus asistentes o cubrir sus propios salarios.
Lo anterior no solo se refiere a la cantidad, sino a la presión de publicar y a los conflictos de interés, pues el dinero no solo proviene de la universidad. Además, la financiación suele otorgarse por unos cuantos años, cuando hay proyectos que requieren de largos periodos de tiempo para dar resultados más certeros.
Un segundo factor son los estudios mal diseñados. Los investigadores son cuestionados por los resultados que publican; por lo tanto, existe una presión para exponer buenos resultados. Esto lleva a tomar decisiones que inciden en cómo se realiza la investigación.
Replicar los resultados es importante, pero los científicos ocasionalmente lo hacen. Los investigadores deben de tomar una investigación anterior para confirmar o refutar si los resultados se sostienen o no. Incluso a veces es difícil replicar estudios, pues sus métodos no fueron correctos o estuvieron mal diseñados.
Un cuarto problema es el hecho de que el sistema de revisión de pares —peer review— tiene a fallar. Científicos que comparten el mismo campo de estudio deben de revisar la investigación de quien publica para confirmar si está bien o aportan una crítica constructiva.
El detalle es que no hay un incentivo para hacerlo, es solo por el deber de; esto lleva a que investigaciones se retrasen o, por dejarlo al último, se omitan errores.
Las publicaciones quedan sujetas a sitios que requieren de una suscripción. Los encuestados comentaron que éstas deben de ser de libre acceso para quienes deseen leerlas. “Me parece mal que los contribuyente paguen con sus impuestos para la investigación por parte de los laboratorios del gobierno y las universidades, pero no tengan acceso a los resultados de esos estudios…”, comentó Melinda Simon, investigadora del Lawrence Livermore National Lab.
No se comunica bien la ciencia al público. Por un lado, el periodismo científico puede exagerar los resultados que se publican. Por el otro, los investigadores sobrevenden sus investigaciones para generar expectativas y recibir financiamiento.
Por último, la vida como joven académico es estresante. A pesar ser apasionados por la investigación, los encuestados comentaron que la experiencia del día a día resulta agotadora y poco gratificante. Los periodos de trabajo son largos; esto afecta a las mujeres que se dedican a la investigación y que contemplan formar una familia, generando así una desigualdad entre la comunidad científica.
Las propuestas para mejorar en los puntos antes mencionados, de acuerdo a la opinión de los entrevistados, destacan los incentivos: en el proceso de la investigación y no en el resultado, en hacer más accesible los resultados al público general, modificar el sistema de revisión de pares así como el de financiamiento de las investigaciones.