Surfea en las aguas de Hawái, mira como la lava se mezcla con el mar y descubre más de Oahu, isla que inspiró la creación de Jurassic Park y la serie de LOST.
Por Redacción TNE
Sol, arena y mar, el verano llegó y seguramente quisieras darte una escapada a la playa. Piensas en muchos lugares, pero en el fondo de tu corazón viajero sabes que quieres ir a una isla paradisiaca y a tu mente viene la imagen de Hawái, un archipiélago ubicado en medio del Océano Pacífico, conformado por varias islas entre las que destacan, Hawái, Maui, Oahu, Lanai, Molokai y Kauai. Quizá no tengas el tiempo (ni el dinero) para explorarlas todas, pero cada una cuenta con peculiaridades que deberás tomar en cuenta a la hora de armar tu itinerario.
Hawái, es apodada como “Isla Grande” porque dobla el tamaño de todas las demás juntas. Aquí puedes iniciar la aventura para dejarte maravillar por la costa Hamakua que combina bosques tropicales, cascadas y valles pintados de un verde intenso. Luego podrás visitar el pueblo de Honokaa donde te encontrarás con tiendas de antigüedades y restaurantes, muchos de ellos utilizando ingredientes y productos que se adquieren en los ranchos ganaderos que hay en el lugar. En esta isla puedes visitar el Parque Nacional de Volcanes de Hawái para conocer más sobre los volcanes activos que ahí se encuentran: Hualalai, Mauna Loa y el Kilauea.
Si decides darte una vuelta a Maui, en el Camino a Hana podrás deleitar tu vista con zonas menos concurridas, nadar en cascadas, recorrer una playa de arena negra o sumergirte en los Siete Estanques Sagrados de O’heo.
¿Buscas actividades culturales? Hawái cuenta con diversas opciones para conocer más sobre los polinesios. La isla cuenta con una diversidad poblacional pues ha transitado por diversas etapas, comenzando por los pobladores originales hasta contar con habitantes provenientes de otras partes.
Aprovecha para ir a los luaus (al cual se dice se debe asistir por lo menos una vez en la vida), banquetes tradicionales donde se sirven platillos típicos, en donde destacan el cerdo kalua, el salmón lomi lomi y la huapia. También puedes disfrutar de una función de danza hula.
¿Te gusta el surfing? Si bien puedes disfrutar de este deporte acuático en cualquiera de las islas, lo más recomendable es que te vayas a Oahu (quizá esta isla venga a tu mente por ser escenario de la película Jurassic Park y de la serie LOST) o a Maui. En esta última podrás asistir al Ho’okipa Beach Park y ver tanto a surfistas profesionales sortear las olas.
Ahora que si prefieres más aventura y adrenalina, puedes irte de excursión sin importar tu nivel de experiencia. Atrévete a subir al cráter de la montaña Haleakala o viaja al este hacia Hana, que pertenece a Maui y escabúllete por un bosque de bambú para luego ir a una cascada. Si te encuentras en la “Isla Grande” puedes recorrer caminos de poco más de 400 km y déjate asombrar por campos volcánicos, tubos de lava y playas.
Súbete a un helicóptero para sobrevolar volcanes activos para ver cómo la lava se mezcla con el agua del mar o recorre las líneas costeras de Kauai y deleita tu vista con los arrecifes y cascadas ocultas.
Después de un día ajetreado o simplemente porque quieres olvidar por un momento todo el estrés citadino, puedes relajarte en una sesión de spa; cada isla ofrece paquetes diferentes y no querrás perderte la oportunidad de recibir un masaje con el sonido de las olas de fondo y la brisa del mar meciendo suavemente las palmas. Si quieres que la experiencia sea más enriquecedora y disfrutable, asegúrate de que el lugar utilice productos e ingredientes locales.
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