07/01/2016 | Por Noticias TNE
ISIS ha destruido sitios protegidos por la Unesco que podrían resurgir impresos en tamaño natural.
Tras los ataques que ISIS ha realizado en Siria, Irak y Libia cientos de monumentos históricos han sido destruidos, sin embargo la impresión 3D es la nueva esperanza para que las ciudades puedan ser reconstruidas con todo y sus íconos.
Gracias a un proyecto financiado por el Instituto de Arqueología Digital (AIF, por sus siglas en inglés) y el apoyo de las universidades de Harvard y Oxford (en donde tiene sus sedes), Londres y Nueva York pondrán en marcha un “llamado a la acción” para generar conciencia sobre lo que está sucediendo en Medio Oriente.
El Arco de Palmira, que tenía más de 2 mil años de antigüedad y fue destruido en octubre pasado, volverá a ponerse en pie gracias a que una réplica exacta será creada en 3D con ayuda de la impresora más grande de este tipo de la que hay registro; para lograrlo se utilizará una mezcla de cemento especial para esta técnica que logrará la composición y densidad del original.
El trabajo se realizará en Shanghai, en donde se hicieron las primeras pruebas que ya fueron expuestas como maquetas en Italia, Londres y recientemente en Nueva York.
“Estamos demostrando que si algo se destruye, se puede reconstruir de nuevo”, afirmó Roger Michel, director ejecutivo de AIF. “El valor simbólico de estos sitios es enorme, estamos restaurando la dignidad de las personas”.
En agosto de 2015, el grupo yihadista dinamitó en Palmira, ciudad inscrita por la Unesco como patrimonio mundial de la humanidad, dos de sus templos más hermosos, Bel y Baalshamin, ambos dinamitados. Después siguió el arco, que se ubicaba en la entrada del recinto y se consideraba “el mayor ícono de la Ciudad”.
Los terroristas consideran este tipo de objetos y monumentos como algo de idolatría a hombres o animales, razón por la que están destruyéndolos.
La presentación de la réplica se espera sea en abril, durante la Semana del Patrimonio Mundial de la Unesco; se espera sea colocado en Trafalgar Square, de Londres y posiblemente después también en Times Square, en NY; los investigadores también realizarán impresiones de objetos de menor tamaño que serán expuestas en museos de ambas ciudades.
Este esfuerzo por revivir el patrimonio de las ciudades se une al proyecto iniciado el año pasado por el artista iraní Morehshin Allahyari, cuyo objetivo es perpetuar la memoria del arte islámico imprimiendo objetos pequeños que él mismo diseña digitalmente.
“No creo que nadie pueda remplazarlos, lo que he tratado de hacer es por lo menos, pensar en una manera de recrearlos de la manera más fiel posible”, señaló. Sus piezas incluyen un chip de memoria que contiene información sobre la obra, dónde estaba resguardada y cómo fue destruida.
Se prepara Unesco con material de respaldo
Gracias a que la Unesco cuenta con una base de datos de millones de imágenes de lugares y piezas históricas de todo el mundo será posible preservar, restaurar o volver a hacer algunos de los más importantes.
Además, en conjunto con el AIF y el Gobierno de los Emiratos Árabes Unidos están repartiendo 5 mil cámaras 3D a voluntarios para que tomen fotos en Medio Oriente y norte de África, que posteriormente se añadirán al archivo previendo que la destrucción de este tipo de sitios continúe.