Por Redacción TNE
Realizar alguna rutina física fortalece tu mente y eso se refleja positivamente en la oficina.
¿Qué tan frecuente sales a correr o vas al gimnasio antes o después del trabajo? Está comprobado que el ejercicio físico no sólo es bueno para la salud, también trae muchos beneficios a la vida laboral porque abre tu mente y te convierte en una persona más productiva.
De acuerdo al orador y CEO de la empresa de Marketing MWI, Josh Steimle, practicar regularmente alguna actividad física puede transformar para bien a cualquier ejecutivo ya que al activar el cuerpo también se pone en alerta su mente lo que ayuda a enfrentar los problemas laborales que puedan presentarse.
La Organización Mundial de la Salud afirma que al realizar algún tipo de actividad física, incluyendo tareas simples como caminar o correr, se aumenta la capacidad pulmonar hasta un 86%, lo que incrementa la calidad y esperanza de vida.
Además una investigación de la Universidad Europea de Madrid, encontró que hacer ejercicio físico aumenta la fuerza muscular y reduce las posibilidades de trastornos músculo-esqueléticos, como el dolor lumbar, una de las principales causas de absentismo y baja laboral en las empresas.
¿Pero cómo es que el ejercicio te hace más productivo? A continuación algunos motivos que harán que diariamente te pongas los tenis:
Aumenta el flujo sanguíneo incrementando tu estado de alerta
El ejercicio físico por muy leve que sea hace que nuestro flujo sanguíneo aumente, lo que conlleva a tener una mejor oxigenación cerebral. Esto te hace estar más despierto, cualidad que agradecerás en la oficina porque tu capacidad para reaccionar ante inconvenientes o tomar decisiones será mejor.
Te hace tener más energía
Realizar actividad física es bueno tanto en las mañanas como por las noches, sin embargo los expertos coinciden que es mucho mejor que se haga a primer hora del día porque te cargarás de energía, despertarás por completo y te hará llegar totalmente renovado a trabajar. Sí, seguramente los primeros días estarás adolorido en lo que tu cuerpo se acostumbra al ejercicio, pero una vez que pase el periodo de adaptación te sentirás mal si antes no saliste a correr.
Mejora tu salud cardiovascular haciéndote más resistente al estrés laboral
Así como el ejercicio mejora el estado de tus pulmones, también hace a tu corazón más fuerte, por lo que todo ese estrés al que te tienes que enfrentar diariamente será pasajero. Correr, caminar, escalar o simplemente moverte es una forma de sacar de tu cuerpo las presiones y relajarte.
Estimula la liberación de serotonina lo que favorece a una mejor salud mental
La Universidad de Cambridge explica que la serotonina es un neurotransmisor en el cerebro que envía mensajes al cuerpo para estimular el estado de ánimo y las emociones; ésta se libera cuando nos ejercitamos para después ayudarte a lidiar con el estrés y evitar que éste afecte tu relación con compañeros.
Además de los beneficios a tu productividad laboral, ten presente que el ejercicio físico es la mejor arma para disminuir los riesgos de padecer diabetes tipo 2, obesidad, hipertensión y enfermedades cardiovasculares.
Sin duda, el ejercicio debe ser una prioridad diaria que debe estar en tu agenda de trabajo. Fíjate el propósito de levantarte más temprano, aprovechar la hora de comida o destinar algunos minutos a tu salud antes de irte a la cama.