La falta de una rutina que mantenga la mente ocupada es uno de los factores que impactan en la calidad de sueño. Que no te gane el ocio y ocúpate para dormir mejor.
¿Has tenido problemas para conciliar el sueño a lo largo de estas semanas en las que has estado más tiempo encerrado? No eres el único y el navegador más popular lo sabe. Resulta que las búsquedas en Google de “insomnio” y “no puedo dormir” llegaron a los niveles más altos en abril, en medio de la cuarentena por el coronavirus.
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Si bien los datos no revelan con exactitud las causas por el repunte, la situación coincide con el mes en los que el encierro forzado por el Covid-19 fue más determinante.
Otro aspecto interesante es que el término “insomnio” fue más buscado en Grecia, seguido por la región norte de Macedonia e Irlanda. Mientras que “no puedo dormir” tuvo alto niveles de registro en Australia, Reino Unido e Irlanda.
El pasado mes de mayo, investigadores de Harvard advirtieron que la pandemia podría afectar la rutina de sueño de las personas.
“Muchas noches sin dormir pueden agravar otros problemas de salud, tanto físicos como mentales”, de acuerdo con una publicación en Harvard Gazzete.
Entre los principales efectos de una mala calidad del sueño se encuentran aspectos cognitivos que van desde la falta de concentración hasta la irritabilidad. A esto se suman diabetes, enfermedades cardiovasculares e hipertensión. Tampoco se puede dejar de lado el incremento en el Alzheimer y en otros padecimientos relacionados con la demencia.
Por otro lado, el insomnio que dura más de dos semanas aumenta el riesgo de generar depresión. La situación se complica porque el tratamiento para esta enfermedad se ve afectado por la privación del sueño.
Crea rutinas y hábitos de sueño para combatir el insomnio
A fin de evitar problemas y no formar parte de la estadísticas de búsquedas en Google de palabras como “insomnio” y “no puedo dormir”, es importante desarrollar hábitos que te permitan mantener la productividad sin afectar la calidad de sueño. Por ello:
- Desarrolla una rutina clara de tus actividades (laborales y personales) y apégate a ellas. En caso de no tener empleo, elabora un horario de tareas; búsqueda laboral, generación de ideas para negocio, cursos en línea, entre otras opciones.
- Procura que, al dormir una siesta, esta no rebase los 20 minutos. Si excedes este tiempo será más complicado conciliar el sueño en la noche.
- No te desveles los fines de semana. Esfuérzate por consolidar un horario para irte a la cama y levantarte al día siguiente. Respétalo todos los días.
- Levántate para realizar alguna actividad si de plano no puedes dormir y solo das vueltas en la cama; por ejemplo, resolver un crucigrama.
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Lo que menos debes hacer es forzar el querer dormir, porque te generará ansiedad. Lucha contra el ocio y las ganas de tirar flojera, mantén tu mente y cuerpo ocupados y tendrás más posibilidades de logra un sueño placentero y reparador.