20/12/16 | Por Noticias TNE
Durante los periodos de prueba se descubrieron escenarios que ponen en riesgo a los ciclistas, en una de las ciudades con mayor densidad urbana.
La compañía originaría de San Francisco reconoce que existe una situación que pone en peligro a los ciclistas, donde los coches no distinguen los carriles especiales donde ellos circulan.
Un portavoz de la empresa comentó que los ingenieros trabajaron en arreglar una falla en la programación que pudiera tener consecuencias graves.
Los hechos se dan en el momento en que la startup comenzó a realizar ensayos con los carros autónomos la semana pasada, a pesar de que los autoridades declararon que aquella requería de permisos especiales para probar este tipo de tecnología.
Durante el primer día, diversas unidades infringieron el reglamento de tránsito al pasarse semáforos en rojo y cometer otras faltas.
Las preocupaciones no se hacen esperar en relación al comportamiento de los vehículos en entornos de alta densidad urbana, sobre todo en una ciudad como San Francisco, donde se realizan alrededor de 82 mil viajes en bicicleta al día en un circuito de aproximadamente 320 km.
La San Francisco Bicycle Coalition (SFBC) emitió un comunicado sobre las primeras experiencias de sus miembros. Cuando el auto se encontraba en modo autónomo, el director ejecutivo de la organización, quien realizó pruebas dos días antes del lanzamiento, observó que dos veces el vehículo giró a la derecha de manera repentina, invadiendo el carril de ciclistas.
Dicha maniobra parece infringir las leyes de tránsito, las cuales establecen que cuando se quiera dar vuelta a la derecha, el automóvil debe incorporarse primero al carril especial y no hacerlo en el último momento, esto para evitar una colisión.
Entre otras violaciones al reglamento fueron que los coches no se detuvieron ante los señalamientos de “Alto” y tampoco cedieron el paso a los peatones.
Representantes del servicio de transportación privada comunicaron al organismo que estaban trabajando en la situación, pero no informaron que el programa de prueba iniciaría dos días después sin los permisos requeridos.
“El hecho de que ellos conozcan que hay un error en la tecnología y persistan en un sorpresivo lanzamiento, demuestra indiferencia por la seguridad”, comentó Chris Cassidy, portavoz de la SFBC.
Por su parte, Uber, a pesar de que está consciente del problema, continúa con las pruebas. Como medida preventiva, ha girado instrucciones a sus conductores para tomar el control de la unidad cuando ésta deba dar vuelta a la derecha.
Lo anterior, a pesar de la petición de Kamala Harris, Fiscal General de California —y senador electo del estado— de suspender las pruebas hasta que se cuente con un permiso especial del Deparment of Motor Vehicles.