Quienes acostumbran a despertar antes de que salga el sol, logran mayores objetivos porque aprovechan más el tiempo que quienes batallan para despegarse de las sábanas.
Levantarte temprano para tener un día de mayor productividad es más sencillo de lo que parece, sólo basta implementar cambios graduales que poco a poco se transformen en hábitos bien arraigados.
Entre los beneficios de madrugar se encuentran un mayor éxito profesional porque estarás más concentrado en tus actividades y serás menos propenso a procrastinar.
1. Cena ligero:
hay alimentos que propician un buen descanso y otros que lo afectan. Evita a toda costa consumir bebidas alcohólicas.
Tip: come cerezas, plátanos y papas dulces; también puedes beber té de valeriana1 o incluso anímate a preparar un caldo de hueso.
2. Libera tu mente:
pensar en los pendientes del día siguiente sólo te genera estrés e incide en la calidad de sueño.
Tip: evita perder tiempo y escribe una sencilla lista de las tareas más importantes que tienes que realizar, separa la ropa que vas a usar y ten en mente lo que desayunarás.
3. Prepárate para el sueño:
dormirse y despertarse todos los días a la misma hora permite al cuerpo habituarse a un ritmo de actividades, pero es necesario eliminar distracciones.
Tip: apaga dispositivos una hora antes de acostarte y mantenlos alejados de ti, incluso en otra habitación. La luz que emiten es un estímulo que te impide descansar correctamente.
4. Sintoniza con la noche:
procura que la habitación esté cómoda, bien aromatizada y climatizada, el olor de lavanda ayuda a relajar el cuerpo y a dormir a gusto2.
Tip: toma un baño de agua tibia y/o lee un libro 20 minutos antes de cerrar los ojos, así el nivel de relajación irá en aumento.
5. Despierta con actitud:
salta de la cama antes de las 5:30 am. Cuando suene la alarma no pulses el botón de snooze e inmediatamente levántate para comenzar el día, no dejes que la tentación te haga volver a acostarte.
Tip: abre las cortinas con el fin de que entre más luz y haz estiramientos, así le darás a tu cuerpo la señal de que es momento de iniciar una nueva jornada.
6. Cuida la primera comida de la mañana:
los alimentos que consumas a primera hora definirán el ritmo de tu día, ingiere aquellos ricos en proteína, carbohidratos y grasas saludables que eleven tus niveles de energía.
Tip: disfruta de desayunos preparados a base de avena y/o huevos. También puedes prepararte un delicioso parfait de yogurt o un smoothie, este último podrás incluso llevarlo contigo.
7. Haz algo que te apasione:
encuentra un motivo que te emocione e incentive a levantarte temprano; no necesariamente tiene que ser algo relacionado al trabajo.
Tip: define una rutina para realizar ejercicio, leer y/o escribir, actualizarte con las noticias, avanzar en un proyecto personal o simplementeplanear el resto del
día. Esto te revitalizará para cuando inicies tus labores.
8. Mantén la constancia:
los cambios para convertirte en una persona matutina no se dará de un día para otro, así que no te desanimes si de pronto caes en viejas prácticas de sueño.
Tip: date un pequeño premio cada día cuando cumplas con tu propósito de levantarte a determinada hora y uno más grande al finalizar la semana.
No pierdas la motivación.
Referencias: 1Health, 2Restonic
Ser una morning person te permitirá sentirte más productivo en momentos donde el tiempo parece transcurrir con demasiada rapidez. Lograrás más si te despiertas antes de que “cante el gallo”.