Ya sea que se lleve a cabo un análisis meticuloso o que sean por experiencia, las decisiones son una acción que realizamos desde el primer minuto de nuestra jornada, sin embargo siempre hay unas más complicadas que otras, sobre todo las que pueden afectar a la empresa o al equipo de trabajo. Diversos directivos afirman cómo realizan un efectivo proceso de toma de decisiones en su día a día.
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EN LA OPINIÓN DE:
MANUEL VILLALÓN LÓPEZ
Socio de Impuestos
Líder Real Estate y Clientes e Industrias Deloitte
¿Utilizas alguna metodología que te ayude a tomar decisiones o te consideras más empírico?
No uso una metodología como las que te enseñan en la escuela, pero sí trato de conservar ciertos puntos antes de tomar una decisión; hacerme de toda la información posible, analizarla y utilizar experiencias que hayan funcionado, para posteriormente tomarla dependiendo de las circunstancias, ya sea en un caso individual o en equipo. Aunque podría parecer que esto es empírico, no lo es, porque está fundado en el análisis de la información y sobre todo en la utilización de la experiencia tanto en lo personal como en la de la firma, que es multidisciplinaria, yo puedo tener práctica en un tema pero no en otro, entonces utilizo la de mis colegas o socios y en función a eso trato de generar una solución en base a datos, experiencia y recursos que tenga a mi alcance.
¿Cuándo es conveniente tomar decisiones individualmente y en qué casos en equipo?
En la parte de operación, las decisiones por lo general son individuales, creo que es sobre una base diaria de cómo manejas los equipos de trabajo, las situaciones interpersonales entre los mismos e inclusive la relación con un cliente o prospecto. En equipo se realizan las decisiones trascendentales tanto para el usuario como para nuestra propia organización con el fin de fijar estrategias y formas de hacer las cosas, por ejemplo, si vamos a asesorar en una transacción de compra donde pueda haber distintos escenarios que se estén presentando, tomo opiniones del equipo que ha estado participando. Es mucho más fácil involucrar a la gente en cómo hacer las cosas para que ellos también colaboren.
¿Cómo hacer para guardar la objetividad en todo momento?
Una parte importante cuando tratas de tomar una decisión es ver qué es lo mejor para la institución, convenga o no en lo personal o para los individuos con los que trabajas. Analizar qué es lo mejor para la empresa es uno de los consejos más trascendentales que he recibido o aplicado en mi carrera profesional.
¿Qué hacer para que el equipo se responsabilice y tome decisiones?
Involucrándolos en la forma en la que se van a realizar, no es lo mismo que llegue alguien y les indique “así se van a hacer las cosas”, a que de alguna forma estén consensadas.
“POR LO GENERAL CUANDO ESTÁS VIENDO UN ESCENARIO, DEBES TENER UN PLAN A, B Y C, MUCHAS VECES ES UTÓPICO PENSAR QUE TODO LO QUE PLANEAS VA A SALIR COMO QUIERES”.
¿Cómo lidiar con lo inesperado?
Por lo general cuando estás viendo un escenario, debes tener un plan A, B y C, muchas veces es utópico pensar que todo lo que planeas va a salir como quieres, trato de tener algún tipo de análisis de variaciones, es decir, si esto no se da o si no es aprobado, ver qué es lo que puedo hacer, si tengo una sola alternativa pues es prácticamente imposible.
¿Alguna vez te has enfrentado a un suceso de toma de decisiones en el que haya sido difícil o retador este proceso?
Creo que lo más difícil es cuando no se tiene el control de las cosas, por lo general al tomar una decisión trascendental tratas de involucrar a los diversos actores, internos o externos y que todo mundo esté alineado, sin embargo es complicado cuando no tienes a alguien que esté en la misma línea con tu idea o con lo que vas a hacer. Lo más difícil podría ser cuando son decisiones que involucran al personal, como una promoción o inclusive con la posible salida de gente, esas son las más complicadas, las demás te vas dando las habilidades, con la experiencia, conocimientos y la preparación constante, sin embargo también hay situaciones para las cuales no siempre estás preparado.
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EN LA OPINIÓN DE:
ADÁN GONZÁLEZ MARTÍNEZ
Director de Mercadotecnia y Comunicación U-ERRE
¿Utilizas alguna metodología que te ayude a tomar decisiones o te consideras más empírico?
Yo me considero más empírico, la verdad es que al día de hoy en la vida real, todo el tiempo estás en riesgo de tomar decisiones en base a hechos y analizando qué ha pasado en la historia que te pueda ayudar, pero hay un punto en el que te tienes que arriesgar para obtener resultados que no has alcanzado antes. Es un balance entre qué tan a gusto o en confianza te sientes contigo mismo para poder avanzar hacia donde quieres, al final de cuentas en los objetivos que te atrasas vas a tomar decisiones para poder lograrlos y decidir qué tan agresivo o qué tan conservador te quieres ver, depende de cada tipo de persona.
¿Cuándo es conveniente tomar decisiones individualmente y en qué casos en equipo?
Trato siempre de cierta forma que el equipo tome la batuta, porque si las decisiones las hacen suyas, normalmente todos vamos a trabajar para que indudablemente se logren los resultados que se quieren, y de esta manera en medida de lo posible, involucrándolos gradualmente de manera que siempre trabajarán sintiendo las decisiones como propias.
¿Cómo hacer para guardar la objetividad en todo momento?
Con mi equipo de trabajo busco siempre conocer su parte emocional, qué les preocupa o les inquieta, y así apoyarlos en lo que es importante para ellos en esos momentos, y no sólo hablamos de la parte económica, aunque ésta es importante, hay otra serie de factores que nos afectan a los seres humanos. Pasamos de 10 a 12 horas en la oficina y el resto del tiempo en casa, muchas veces el que estén tranquilos en el hogar significa que se puede desarrollar bien el trabajo, si logras empatar su estabilidad con las decisiones que toman, siempre vas a potenciar el talento de cada uno y poder unir una serie de valores con individuos trabajando bajo un mismo objetivo.
“TIENES QUE ESTAR CONVENCIDO QUE HICISTE LO MEJOR QUE CREÍSTE CONVENIENTE, NO SE VALE IRTE PARA ATRÁS, DEBES AFRONTARLO, SUPERARLO Y ENTENDER QUE SIEMPRE HAY RIESGO A LO LARGO DE LA VIDA”.
¿Qué hacer para que el equipo se responsabilice y tome decisiones?
Apoyarlos para que crean en ellos mismos, que sepan que tienen la capacidad de poder desarrollar y tomar esas decisiones y que comprendan que si se equivocan, lo hacemos todos. Darles la confianza de creer en ellos mismos e informarles que los vamos a respaldar si la elección fue errónea, no somos perfectos y si todos comenzamos a tomar decisiones y nos encaminamos al objetivo no tienen porque salir mal las cosas y no hay porqué echar culpas.
¿Cómo lidiar con lo inesperado?
Cuando pasa algo sorpresivo, si esto es positivo es más fácil de asimilar y llevar a cabo, pero cuando es algo negativo lo que se debe es analizar bien la situación, evaluar los pros y los contras de cada una, y si es posible involucrar en el momento a la gente que sepa más del tema. Una de las frases que uso mucho es “el que no arriesga, no gana” y siempre tienes que atreverte para poder ir más allá. El mundo en el que vivimos actualmente está buscando nuevas formas de hacer las cosas y no irse siempre por los carriles que ya han sido transitados.
¿Alguna vez te has enfrentado a un suceso de toma de decisiones en el que haya sido difícil o retador este proceso?
Siempre te enfrentas a ese tipo de situaciones en lo personal, profesional o emocional, y todo aquello que vives es un aprendizaje y lo tienes que capitalizar de esa forma, sea bueno o malo, ya sea si tomaste decisiones acertadas o no, te van dejando la experiencia o volviendo diferente a los demás. Al final de cuentas tienes que estar convencido que hiciste lo que creíste conveniente, no se vale echarte para atrás, porque el hubiera no existe y solamente te vas a martirizar, debes afrontarlo, superarlo y entender que siempre hay riesgo a lo largo de la vida.
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EN LA OPINIÓN DE:
JULIO ESCANDÓN JIMÉNEZ
Director de Administración y Finanzas de Banco Base
¿Utilizas alguna metodología que te ayude a tomar decisiones o te consideras más empírico?
Más que una metodología definida como tal, yo más bien trato de seguir cierto orden basado en un hábito generado después de muchos años de trabajo y experiencia. Si hay tiempo para tomar una decisión, busco hacer preguntas, como ¿por qué sucedió tal cosa?, ¿qué tiempo tenemos para tomarla?, ¿con qué tipo de información se cuenta?, etc. En este sentido sí es algo más empírico, ya que viene de la experiencia; de más joven, por ejemplo, tendía a tomar decisiones más impulsivas y ahora con el tiempo te vas volviendo más cauto y prudente.
¿Cuándo es conveniente tomar decisiones individualmente y en qué casos en equipo?
Generalmente siempre es mejor hacerlo en equipo y consultar a otras personas. En muchos casos ya tienes la decisión, pero aún así, es mejor preguntar la opinión a tu equipo de trabajo, esto hace que los involucres, haciéndolos sentir parte del proyecto. Además de que es una especie de “coacheo” para que las personas que te rodean vean por qué se está eligiendo dicha acción. Sin embargo, algunas veces es imposible por la urgencia o naturaleza de la situación, por lo que debes tomar la decisión por sí sólo en ese momento, todo dependerá de las circunstancias.
“YO SIEMPRE LES DIGO, ‘SÍ TE PUEDES EQUIVOCAR’, SIN EMBARGO EL PROBLEMA NO ES ESE, SINO QUÉ HACEMOS DESPUÉS DEL ERROR, ESO ES LO MÁS IMPORTANTE, SOLUCIONARLO Y NO TRATAR DE CULPAR A ALGUIEN MÁS”.
¿Cómo hacer para guardar la objetividad en todo momento?
A pesar de que el tiempo te va ayudando a tomar mejores decisiones para la compañía, aun así, existen ciertas cosas que se pueden hacer para ser objetivos, como mantener la calma y pensar que no es el fin del mundo. Yo trato de mentalizarme que todo tiene solución y que sólo es cuestión de buscarla. Cuando la situación esté al rojo vivo, el conservar la tranquilidad te ayuda incluso a dar una sensación de serenidad para los que te rodean y aunque es difícil, es una estrategia para sacar lo mejor de la gente, de manera que puedan ayudarte a encontrar la mejor solución, de forma inteligente y racional.
¿Qué hacer para que el equipo se responsabilice y tome decisiones?
Confianza, la única manera de que esto suceda es haciéndoles ver que la decisión que tomen va a ser buena e inteligente. Yo siempre les digo, ‘sí te puedes equivocar’, sin embargo el problema no es ese, sino qué hacemos después del error, eso es lo más importante, solucionarlo y no tratar de culpar a alguien más. Esto debe de ser así, por que el pensar en que tú vas a tomar todas las decisiones es imposible, además de que afecta al negocio, porque lo único que se provoca con eso es retrasar los procesos y generar más costos a la compañía.
¿Cómo lidiar con lo inesperado?
Tratando de mantener la calma, preguntar e investigar, pero de no ser esto posible dejarse llevar por la intuición y el olfato que te da la experiencia, puesto que al final del día debemos de estar acostumbrados a lo inesperado. Generalmente casi todas las decisiones se toman con poca información y en circunstancias repentinas, aunado a que muchas de este tipo de elecciones relevantes que cambian el curso de los negocios, son así, de último momento y difíciles.
¿Alguna vez te has enfrentado a un suceso de toma de decisiones en el que haya sido difícil o retador este proceso?
Frecuentemente, por lo que trato de seguir una estrategia casi psicológica de mandar una señal de tranquilidad, aunque muchas veces no sea la situación real. Hace un par de semanas me enfrenté a una decisión complicada que debía ser resuelta en ese momento, pues de otra manera el resultado hubiera sido muy complicado para el banco, por lo que la discutí con mi jefe. En este caso, influyeron muchos factores para llegar a una resolución, como el haber realizado las preguntas adecuadas, además de estratégicamente haber tratado de aplazarlo un poco, no es lo mismo dar una respuesta en ese instante que unos minutos después, que pueden darte conciencia mental para elegir lo más conveniente para la compañía.
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