Por Noticias TNE
A pesar de sus diferencias, lo que ocurrió en 2008 con Obama, se ha repetido en estas elecciones con Donald Trump.
“Triunfará aquel que pueda hacer llegar su mensaje a la gente y diferenciarlo entre todo el ruido que hay en Internet”, es lo que afirmó Rahaf Harfoush hace algunos meses, quien fue voluntaria en el área de redes sociales de la campaña de Barack Obama en 2008.
Esta “antropóloga digital”, como ella se denomina, admitió que el secreto para ganar unas elecciones es combinar el uso de redes sociales y el análisis de datos. En aquel tiempo Obama representaba un mensaje esperanzador que realmente prometía un cambio después de que millones de estadounidenses estaban cansados de lo mismo, fue denominado por el Washington Post como el “Rey de las Redes Sociales”, pues se convirtió en el primero de los candidatos en crear su perfil en las diferentes plataformas y destinar recursos y talento para manejarlas como estrategia de comunicación. Ésta fue la primera vez en la que se cerraron las brechas entre el candidato y los votantes, quienes exigían más transparencia y cercanía con los aspirantes a gobernar.
Con el aumento del uso de redes sociales como Facebook, Twitter e incluso Snapchat, además de plataformas como YouTube, que se ha convertido en “la nueva televisión”, las reglas han cambiado y de acuerdo a Harfoush, quien haya logrado destacar entre tanto ruido en Internet y diferenciarse al transmitir su mensaje, ayudando a los votantes a procesar toda la información, será quien resulte vencedor.
Aunque Obama y el republicano Donald Trump tengan diferencias inmensas, lo cierto es que ambos tienen algo en común, dominan el poder del social media, aunque el mensaje sea muy distinto uno del otro. Harfoush asegura que “ha habido un cambio. Donald Trump tiene redes sociales y puede lanzar su mensaje por ese canal sin necesidad de esperar a que le entrevisten o le inviten a un programa de televisión. Sabe que los medios de comunicación recogerán lo que diga”.
Estas elecciones han comprobado que no es tan relevante tu mensaje, sino los medios y la forma de comunicarlo, ante esto Leandro Rodríguez Medina, investigador de la Universidad de las Américas, expresa que la política en Estados Unidos en vez de avanzar está retrocediendo. “Muchas de las cosas que están diciendo los candidatos no se van a cumplir y esto es histórico en una campaña estadounidense ya que esto no pasaba, los candidatos se habían protegido mucho más de no decir lo que no pueden cumplir” destaca.
Después de haber llevado a la Casa Blanca a un Presidente de color, se está viviendo un fenómeno mediático en el que el protagonista es un candidato xenófobo que convirtió la manipulación de redes sociales y medios en su mejor estrategia.
El ejecutivo de Relaciones Públicas de The Daily Caller, Josh Nass, afirma que nadie ha logrado conseguir tanto tiempo al aire como lo ha hecho Trump, aunque los otros candidatos tengan propuestas más relevantes que comunicar a sus votantes. Los minutos que tienen en medios de comunicación los han malgastado en su mayoría por responder al controversial Republicano, lo que le ha costado a muchos de los candidatos como Jeb Bush quien renunció a la contienda y se proclamó a favor de Ted Cruz para ganar la candidatura frente a Trump.
A pesar de que los republicanos se hayan contrapuesto a Donald con hashtags como #NeverTrump en Redes sociales, no han logrado “tumbarlo”, pues actualmente es el candidato con la mayor cantidad de seguidores en Twitter y el más buscado en Google, por encima incluso de los precandidatos demócratas, además de que el 80% de las menciones acerca de los candidatos republicanos es sobre él.
Por su parte, a pesar de que Hilary Clinton es favorita entre los demócratas, su contrincante Bernie Sanders la supera en búsquedas de Google, resultados que se han mantenido estables durante toda la campaña.