Por Redacción TNE
Emprender tiene sus beneficios, pero aprovéchalos al máximo a través de los espacios de trabajo colaborativo.
Ser emprendedor tiene, ya de por sí, sus ventajas: eres tu jefe, tienes tu propio horario, no debes rendirle cuentas a nadie. Además, puedes trabajar desde casa. Pero, lo anterior también puede jugarte en contra, por lo que es momento de considerar la opción del coworking.
Laborar desde el hogar tiene sus inconvenientes cuando las distracciones están a la orden del día: es tentador ponerse a ver algún partido de la Champions League; si hay familiares alrededor pueden tener la idea de que “estás disponible” y puedes darles atención. Por el otro lado, si buscas una oficina para hacer tu trabajo, incrementas los costos, y quizá su situación financiera no está en sus mejores condiciones.
Un principio de colaboración
El coworking es considerado una ideología de trabajo que se caracteriza por la cooperación, el desarrollo de la creatividad y del talento, así como de las habilidades comunicativas; es un espacio donde se agrupan emprendedores para trabajar en conjunto para implementar y desarrollar sus ideas.
Quienes aprovechan esta modalidad de trabajo han demostrado ser más efectivos gracias, no sólo a la energía desplegada, sino a la mentalidad; de alguna manera es algo que se contagie en el grupo debido a la interacción entre sus miembros, mismos que persiguen una meta.
Reunirte con otras personas permitirá que encuentres inspiración, pues seguro enfrentan situaciones similares en las que podrán apoyarse y aconsejarse unos a otros.
Considera que ellos también decidieron llevar el mismo estilo profesional —y de vida— que tú.
Aprovecha al máximo las ventajas del trabajo colaborativo
Deja de trabajar en el comedor de tu departamento; dile a tu mascota que al rato regresas y reúnete con otros que contribuyan a tu crecimiento; considera las ventajas del coworking:
· Disciplina y motivación: saber que tienes que ir a un lugar en específico te permite crear una rutina de trabajo; si bien eres independiente, puedes crear un horario laboral para separar tu vida profesional de la personal y social. Recuerda que irás a un lugar donde encontrarás gente que te motivará y tú a ellos.
· Intercambio de conocimiento: interactuar con otros coworkers permitirá compartir sugerencias, ideas, problemas a los que te enfrentas para recibir retroalimentación —y darla—; quizá tú ya pasaste por una situación similar y puedes orientarles o viceversa. Recuerda que los emprendedores, además de atender una necesidad del mercado, buscan generar un impacto social positivo. Comienza con tu entorno inmediato.
· Mejora tu red de contactos: la interacción en un espacio cowork no sólo ampliará tu agenda profesional, sino también la social. Además de encontrar posibles socios, podrás crear lazos de amistad. Puedes encontrar clientes o inversores si aprovechas las reuniones de networking.
· Espacios abiertos 24 horas: tú defines el horario. ¿Cuándo eres más productivo, durante las mañanas, las tardes o eres un búho hecho y derecho? Considera la posibilidad de que es mejor recibir a un potencial cliente en un espacio profesional que en la sala de tu casa.
· Aprendizaje continuo: en las instalaciones se ofrecen talleres, algunos gratuitos, otros con algún costo adicional; pero así, tienes la oportunidad de adquirir conocimientos que expriman tu potencial para llevar tu idea y proyecto a buen puerto. Además podrás contar con mentorías gratuitas, ¡qué mejor que la orientación de expertos en el tema!
Aprovecha estos beneficios para mejorar: tu autoestima al socializar con otras personas; la salud, pues evitas el aislamiento. Benefíciate de esta modalidad de trabajo, cada vez más popular y que está redefiniendo la forma de trabajar.