El 2024 se perfila como un año de reestructuración y crecimiento para el Venture Capital en América Latina, a medida que las valuaciones en la región se regularizan después de las altas tasas de inflación que tuvieron hace un par de años.
En el cambiante panorama del Venture Capital en México y América Latina, el 2024 se perfila como un año de reestructuración y cautela, pero también de oportunidades emergentes, especialmente en sectores tecnológicos a causa de los avances en la inteligencia artificial que continuarán impulsando la innovación en el fintech, healthtech, edtech, proptech y mobility tech.
La evolución reciente del Venture Capital en Latinoamérica
De acuerdo con el último informe de Cuantico “Latin America Venture Capital Report 2023”, el año pasado la inversión total en la región fue de $2.78 mil millones de dólares, distribuidos en 742 rondas de financiamiento. Estas cifras representan una disminución del 65% en comparación con 2022, registrando el nivel más bajo de financiación en los últimos 5 años.
Mario García, cofundador & Managing Partner de AngelHub Ventures, admite que los últimos dos años han sido muy complicados para el VC en general, pero las inversiones de etapas más avanzadas (series A, B y C) han sido las más afectadas, con un menor número de transacciones y montos considerablemente menores de capital distribuido.
Por otro lado, a pesar de que el entorno de inversión latinoamericano sigue mostrando signos de contracción con respecto a los años récord anteriores, se observa un interés renovado por parte de los fondos de inversión en etapas tempranas debido a que las valuaciones en el mercado están alcanzando sus niveles naturales, después de la importante inflación que impactó en el 2021 y afectó las inversiones en la región en los últimos años.
“A pesar de todo, el panorama para los inversionistas ángeles no es negativo ya que el día de hoy hay valuaciones de startups mucho menos infladas y más justas que las del 2021, lo cual hace más atractivo invertir en una startup por el margen de ganancia.”, declaró García al respecto.
La visión del reconocido emprendedor, Rogelio de los Santos, socio fundador de Dalus Capital coincide con la de Mario, proyectando que el 2024 será un año de crecimiento para el VC, sobre todo en el segundo y tercer trimestre.
Según el también inversionista ángel y fundador del festival de emprendimiento INCMty, hoy en día nos encontramos casi en los mismos niveles pre pandémicos en cuanto a la cantidad de recursos y al número de inversiones que se siguen haciendo alcanzando un “nivel natural”.
Algunas estadísticas muestran que en etapa temprana el volumen ya está llegando al mismo nivel de cantidad de “deals”, pero son mucho más pequeños que las grandes cantidades de dinero que se invirtieron en el 2021.
Lo anterior se debe a que las firmas internacionales importantes, mismas que estaban acostumbradas a levantar $1,000 o $2,000 millones de dólares en sus rondas de levantamiento de fondos, actualmente han alcanzado apenas el 30% de esto, lo que implica que los tickets tienen que ser más pequeños si quieren mantenerse activos.
Los años de ajustes
En el 2021, la región alcanzó su punto máximo de inversión detonado por factores como el lanzamiento del Latam Fund de SoftBank que provocó un importante desequilibrio en las valuaciones y dinámicas del ecosistema.
El socio fundador de Dalus Capital admitió que este hecho provocó que tanto los fondos como los inversionistas se volvieran mucho más selectivos en cuanto a las inversiones que han venido procesando posterior al 2021.
“En lugar de hacer 8 tickets estamos haciendo cuatro o 5 en el año; porque estamos cuidando más los recursos, en donde ponemos esos tickets y sobre todo con quién: con qué perfil emprendedor, de proyecto y también de co-inversionistas, ya que se vuelve un factor muy importante el sindicato de inversión.”
De hecho, Rogelio de los Santos considera que los siguientes 2 trimestres van a ser los últimos en los que las startups todavía van a poder conseguir valuaciones atractivas para invertir.
De los Santos explicó que las startups que levantaron valuaciones altas en el 2021 se han enfrentado a grandes retos para mantenerse porque primero vino la caída del Banco de Silicon Valley, por lo que se vieron obligadas a volverse rentables y salir adelante.
De hecho, los proyectos que están sobreviviendo está por verse si continuarán lográndolo en los siguientes 3 semestres, ya que incluso algunos grandes unicornios se están viendo en una situación difícil perdiendo sus valuaciones hasta en un 90%. Mientras tanto los que no levantaron valoraciones tan altas todavía están soportando las valuaciones gracias a sus tasas de crecimiento.
“Hay empresas como estas que han aumentado 3 veces su tamaño más no su valoración por el ajuste de múltiplos que ha habido”, mencionó Rogelio.
Por otro lado, el socio fundador de Dalus Capital recalcó que los efectos han sido mucho más pronunciados para las inversiones en etapas tardías que en etapas tempranas y que los inversionistas ángeles de semilla o Serie A fueron de los menos impactados.
A pesar de lo anterior, De los Santos señala que la tendencia marca que vendrá un ajuste hacia la alza, ya que “así es como la industria ha venido creciendo los últimos 60 años”.
Las ventajas del ecosistema latinoamericano de VC
Rogelio de los Santos considera que la ventaja más importante que Latinoamérica ofrece es el hecho de que su asset class ha tenido un comportamiento diferente a los mercados públicos y está todavía subdesarrollada con respecto a otras economías, por lo que todavía hay gran oportunidad para participar.
Adicionalmente, un factor importante es que al igual que en otros mercados desarrollados, si no existe una red de ángeles madura que equivalga al monto de recursos que necesitan los fondos, no habrá un ecosistema sano y nunca es bueno seguir subsidiando, manteniendo un ecosistema que no tiene toda la continuidad de financiamiento completa y por otro lado que sea capaz de generar salidas.
“Por cada dólar que se está invirtiendo en Latinoamérica al año, deberíamos estar teniendo salidas de 3x de ese valor, si no el ecosistema no está completamente balanceado y hay que seguir haciendo ajustes o atrayendo a otros actores”, mencionó.
Rogelio de los Santos considera que los que necesitan hacerse más presentes o darle una mayor importancia al tema son los corporativos.
“Se requiere que los corporativos empiecen tanto a apreciar como a reconocer el valor de la innovación y se animen a apoyar a las empresas como ya hemos visto que algunos corporativos comienzan a hacerlo aquí en México o en Brasil, pero necesitamos que esto se extienda a más industrias y países”, comentó.
Por otro lado, tanto Rogelio como Mario coinciden en que recientemente sucedió un ajuste de múltiplos bastante fuerte en la industria que provocó que en marzo del 2022 la política monetaria cambiara de un modelo enfocado en el “growth” o crecimiento a uno de eficiencia, trayendo grandes oportunidades a la región como: el nearshoring, reshoring, offshoring y techshoring.
“Sin duda el nearshoring representa una gran oportunidad de negocio para las startups que buscan ofrecer servicios innovadores en dicho espacio o para los jugadores que están llegando a este espacio”, comentó Mario García.
“Cada vez vemos más startups B2B con soluciones tecnológicas innovadoras para corporativos, empresas de manufactura o proveedores que están llegando o se están instalando en México aprovechando esta tendencia y oportunidad actual del nearshoring”, añadió al respecto.
Áreas de oportunidad de inversión en Latinoamérica
Rogelio de los Santos enfatizó la importancia de que los inversionistas tengan una tesis de inversión bien definida antes de salir al mercado. El socio fundador de Dalus Capital compartió que a través de sus años de experiencia, ha logrado identificar dos grandes áreas de oportunidad de inversión en Latinoamérica: la inclusión y la innovación climática.
Mientras tanto, Mario García resaltó que en el 2024 otra área de oportunidad de inversión muy atractiva son las soluciones tecnológicas que usan la inteligencia artificial generativa para disrumpir y eficientizar modelos de negocio existentes.
“La IA generativa más que una moda es una tendencia tecnológica que está demostrando su potencial para generar fuertes grados de innovación y mejoras (eficiencias y ahorros), por lo que las startups en este espacio están incrementando su potencial de generación de valor de forma muy interesante lo que los vuelve más atractivas para inversión.”, mencionó García al respecto.
De los Santos afirmó que en el 2023 las inversiones enfocadas en inteligencia artificial y analíticas continuarán incrementando significativamente, argumentando que en el 2023 representaron solo el 7.5%, pero en lo que va del 2024 han acaparado alrededor del 80%, reflejando el gran entusiasmo que existe en torno a esta tecnología.
Los desafíos del VC en la región
Cabe mencionar que las oportunidades para el VC también vendrán acompañadas de importantes desafíos para los inversionistas, comenzando por el hecho de que el proceso de realineamiento de la industrialización en México requiere una visión a largo plazo, centrándose en la sostenibilidad e inclusión, enfocado en hacer más competitiva a la región con respecto a Norteamérica.
Por otro lado, también está el reto de preparar al ecosistema con la infraestructura de tecnología necesaria para impulsar nuevas oportunidades de innovación en finanzas, energía, comunicación, logística y muchas otras industrias. Para esto se necesita no solamente grandes inversiones económicas, sino también en recursos humanos en lo que respecta a la generación de talento.
Hay una gran necesidad de impulsar el desarrollo de las habilidades requeridas para el futuro en los colaboradores y adaptarse para tener un valor agregado. Es aquí donde el reskilling y el upskilling entran en juego para el sector, según Rogelio de los Santos.
El reskilling trata de formar a un empleado para adaptarlo a un nuevo puesto en la empresa, mientras que el upskilling busca enseñar a un trabajador nuevas competencias para optimizar su desempeño, por lo que la implementación de ambos será fundamental para impulsar el desarrollo de talento tecnológico en Latinoamérica y por consecuencia las inversiones en la región.