Los resultados de empresas en todo el mundo están viéndose afectados por problemas de salud mental como ansiedad o estrés, ¿Qué podemos hacer para evitarlos?
Las enfermedades de salud mental se han convertido en uno de los principales problemas para las organizaciones en la actualidad. Los resultados y el rendimiento de muchas empresas a nivel global se han visto afectados por ansiedad, depresión y otros padecimientos que no permiten a los colaboradores dar su 100%. Antonio Reyes, socio fundador de Impra Consultores nos habla de los efectos de una mala salud mental en una organización y como revertir esta problemática.
1. ¿Cuáles son los problemas de salud mental más comunes hoy en día? ¿A qué se debe?
Hablando de México, la Organización Mundial de la Salud estima que el 75% de las personas trabajadoras en México padecen sentimientos de agotamiento, distanciamiento mental del trabajo y estímulos negativos relacionados con su desempeño, por ejemplo, falta de realización, falta de reconocimiento, etcétera. Estas son respuestas disfuncionales frente al estrés y son síntomas importantes de burnout.
Ahora, ¿cuáles son las causas? Lo que se ha identificado a nivel de estudios sobre poblaciones laborales, es que estamos hablando de que se encontraron altos índices con trastornos de ansiedad y también lo que se conoce como depresión suave, es decir, personas con falta de motivación, que se desconectan de las relaciones personales en el trabajo y se desvinculan de los intereses, así como de los valores de la organización.
2. ¿Cómo afectan los problemas de salud mental al comportamiento y desempeño de los colaboradores y cómo se refleja en los resultados de una empresa?
A nivel de la empresa hay ciertos indicadores que los departamentos de RH, de salud organizacional, así como las personas que se dedican a medir la calidad y el desempeño organizacional tienen bien identificados. Estos son: ausentismo, reclamos por incapacidad, bajo compromiso de las personas con sus resultados, se ponen irritables y más, pero esto es lo típico.
Por el lado de las personas también hay ciertos indicadores ya muy bien identificados, por ejemplo, empiezan a tener reacciones psicológicas extremas, es decir, que se preocupan demasiado al grado que se paralizan, o al revés, no se preocupan para nada y entonces se vuelven extremadamente osados, no les importa lo que pasa en la empresa, ni sus resultados y esto pasa por que al traer un problema psicológico simplemente no logran engancharse.
El resultado de esto para la empresa son pérdidas de dinero y de sentido de pertenencia. Para ilustrarlo, es como si en una organización que en principio está funcionando bien, de repente en el centro alguien se pusiera a hacer un agujero con un taladro neumático y a producir una cantidad de ruido que no deja a nadie trabajar.
Entonces, por un lado, las personas empiezan a tener malos indicadores de rendimiento, se empiezan a desempeñar pobremente, su productividad y eficiencia se caen, pero, además, ese sentimiento “se contagia” al resto de la organización.
3. ¿Cómo se pueden identificar los problemas de salud mental en los trabajadores para poder invertir los recursos donde realmente se necesitan y tengan un mayor impacto en una organización?
El estándar de oro son las entrevistas clínicas. El problema de esta técnica es que se requiere de 2 a 4 horas de sesiones individuales con cada persona y eso tarda muchísimo tiempo, además de que es muy costoso porque involucra pagarles a profesionales altamente calificados para que hagan la entrevista clínica y después elaboren reportes, para que una vez teniendo los resultados las empresas puedan analizarlos y poner en marcha iniciativas para mejorar la salud mental de sus miembros.
Aunque ese sea el estándar de oro, es casi imposible de seguir, por lo que desde hace unos 20 años para acá se ha tratado de empaquetar en una plataforma que mediante la aplicación de inteligencia artificial, incluya mecanismos más sofisticados, es decir, buenas herramientas teóricas y clínicas, pero que funcionan gracias a la tecnología.
Hoy en día para identificar los problemas se requiere de sistemas de inteligencia artificial capaces de hacer algo similar a la impresión que tendría un especialista después de hacer una entrevista clínica, que sean ágiles, rápidos y mejores herramientas que las que tenemos con un examen psicométrico o con la opinión no informada de un jefe o compañero. Estos sistemas no sustituyen a otras herramientas con las que cuenta la empresa, sino que las complementan y, así, fortalecen las tareas del cuidado de la gente y crecimiento del negocio.
4. ¿Principalmente en que fallan las empresas al intentar mejorar la salud mental de sus empleados?
En la implementación. Primero, muchas organizaciones no miden y si no se mide realmente no se sabe que está pasando. Hay un proceso que es bastante lógico que definió hace mucho tiempo William Thomson Kelvin “si tú no lo defines no lo puedes medir, si tú no lo mides, no lo puedes mejorar y si tú no lo mejoras, va a empeorar.” Y es categórico, si no se realiza la definición, medición y la mejora, las cosas ni siquiera se van a quedar igual, van a empeorar.
Entonces, lo que ocurre es que en las organizaciones o no se tienen buenos marcos de referencia para definir, o no se hace la medición porque es muy costoso, o, cuando intentamos mejorar lo que hacemos sin tener bien delimitado el objetivo, sin que se haga de un modo quirúrgico, resulta que no hay dinero que alcance, ni resultado que realmente funcione.
Entonces se trata de poderles acercar a las empresas dos cosas en un paquete: un buen marco de referencia y una herramienta tecnológica, que les permitan transitar desde la definición hasta la acción, justo para poder identificar problemas de salud mental en su gente y ayudar a los colaboradores, promoviendo iniciativas que logren ambientes más sanos y que estén enfocadas justamente en donde más duele y en donde pueden tener un mayor impacto en la gente, así como en los resultados de la empresa.
5. ¿Qué acciones puede poner en marcha una compañía para revertir los problemas de salud mental de sus empleados?
Es con planes de acción bien seleccionados, medidos y orientados como se logra un verdadero avance, con impactos en la gente y el negocio. Una vez que se tiene bien claro cuál es el problema en la organización, es fundamental diseñar o elegir de tu portafolio de planes de acción, aquel que corresponde y ataca específicamente la situación que necesitas resolver.
Por otro lado, es indispensable poder medir los resultados antes, durante y después de la implementación de cualquier plan de acción, para saber si las cosas realmente están cambiando.
6. ¿Qué puede hacer una empresa para prevenir problemas de salud mental?
Se necesitan ambientes de trabajo virtuosos, en donde las personas se sientan importantes para los demás, incluidas y respetadas. Si se crea un entorno así, en donde los colaboradores genuinamente sienten que sus compañeros trabajan y se suman para el mutuo beneficio emocional, laboral y económico, se sentirán seguros y desempeñaran mejor.
Los problemas de salud mental afectan gravemente a nuestra gente y, por ende, a los resultados de las organizaciones. Afortunadamente hoy contamos con soluciones tecnológicas que facilitan la detección y reversión de esta problemática. Sin duda las organizaciones que se animen a adoptar un sistema para identificar trastornos de depresión, ansiedad y burnout serán las que puedan revertir la situación, creando un entorno favorable donde los empleados se sientan motivados.