Una transformación digital hacia la nube bien planeada permite a las organizaciones aprovechar al máximo todas las oportunidades que esta tecnología ofrece.
Generar valor desde las funciones del departamento de Tecnologías de la Información (TI) es un reto continuo para el liderazgo de las empresas. Por ello, es fundamental considerar la inclusión de tecnologías basadas en la nube, ya que la oferta de soluciones de esta naturaleza es un importante habilitador del proceso de gestión tecnológica del cambio.
Los esquemas en la nube también funcionan como detonadores de la aceptación y asimilación de las nuevas tecnologías, indispensables para que la estrategia de generación de valor contribuya a una mayor competitividad de la organización.
El uso de tecnologías en la nube ha ido creciendo a ritmo acelerado durante la última década, dividiéndose en tres diferentes vehículos o formatos de entrega: el segmento de infraestructura en la nube como servicio (IaaS), el de software en la nube como servicio (SaaS), y finalmente, el de plataforma en la nube como servicio (PaaS).
En este sentido, ¿cómo aprovechar las oportunidades que nos brinda la tecnología en la nube con miras a lograr una mayor rentabilidad y eficiencia de la operación? Es mediante la implementación de estrategias de transformación digital que se puede alcanzar esa meta y obtener los beneficios que brinda, entre los que destacan:
1. Satisfacción de las necesidades de cada departamento, al alinear la estrategia de TI para así crear un plan integral de implementaciones que incluya las diversas áreas.
2. Mayor eficiencia en el uso de los recursos disponibles (personal, activos, procesos y software y aplicaciones).
3. Reducción de tiempos de entrega (de productos o de servicios), minimizando las posibilidades de cometer errores durante el proceso de implementación.
4. Capacidad para realizar monitoreo constante y generar reportes continuos en tiempo real, lo que permite dar seguimiento a los procesos de cambio, actualización de tendencias, índices de satisfacción y preferencias del cliente.
5. Poder realizar pruebas, cambios y modificaciones de forma ágil y rentable, ya que se cuenta con información detallada. Esto permite análisis efectivos y minimiza el tiempo requerido para adecuar procesos, arquitecturas tecnológicas, asignar recursos, proyectar recursos en la nube y gestionar de manera efectiva a los proveedores de servicios en nube
La transformación digital hacia la nube es un viaje que involucra a toda la organización y representa un gran reto de coordinación y, como en toda travesía, es necesario contar con la correcta planeación a fin de minimizar riesgos y aprovechar las oportunidades que el “journey to the cloud” ofrece.
La planeación inicia con el diseño de los sistemas y la determinación de la mezcla de tipos de servicio, ya sea migración total a la nube con una base resiliente y segura, o un esquema híbrido donde se usan recursos y servicios legados (on-premise) y se implementan el resto en la nube.
Sin duda, dependiendo de las necesidades y condiciones de la empresa, es posible crear un plan de transformación digital con servicios en la nube que se adecue a sus necesidades.
Andrés Aldama, Socio de Asesoría en Estrategias y Procesos de Transformación Tecnológica (CIO Advisory) de KPMG en México;
Octavio Flores, Director de Asesoría en Estrategias y Procesos de Transformación Tecnológica (CIO Advisory), Especialista en Tecnologías en la Nube de KPMG en México.