El nuevo modelo inteligente tiene Auto-GPT, es capaz de autogestionarse para plantearse y cumplir nuevos objetivos, basándose únicamente en una indicación, sin la necesidad de constante intervención humana.
La llegada de la inteligencia artificial generativa se ha convertido en el perfecto ejemplo de como la tecnología está avanzando a una velocidad descomunal. Desde la llegada de ChatGPT en noviembre del 2022, los desarrolladores han logrado crear modelos avanzados de lenguaje cada vez más capaces como GPT-4, Bard de Google o BingAI. Ahora, llega un nuevo sistema inteligente más potente llamado Auto-GPT que puede autogestionarse de forma prácticamente autónoma con base en objetivos, algo que, hasta ahora, no hace ningún modelo de forma propia.
Auto-GPT es una aplicación de código abierto en etapa experimental que fue desarrollada en Python por el programador Toran Bruce Richards. El modelo permite a los usuarios ejecutar GPT-3 y GPT-4 como agentes totalmente autónomos a través de una API. Además, tiene acceso a motores de búsqueda en la red, por lo que puede ofrecer resultados o aprender información de consultas publicadas en internet. Estamos hablando de un sistema que opera bajo la misma lógica que ChatGPT, pero que reduce al mínimo posible la intervención humana.
¿Cómo funciona el nuevo sistema de inteligencia artificial generativa Auto-GPT?
ChatGPT, Bard y la gran mayoría de los sistemas similares operan en función de los datos obtenidos de las preguntas o indicaciones que introducen los usuarios de manera consecutiva. Los modelos de lenguaje avanzados analizan cada pieza de información de la entrada, para posteriormente recabar datos de diversas fuentes y así entregar una respuesta coherente. Este proceso se repite cada vez que las personas escriben una nueva orden.
Mientras tanto, Auto-GPT, a diferencia del resto de los modelos existentes, posee la capacidad de generar sus propios objetivos con tan solo una solicitud o indicación inicial por parte del usuario, lo que le permite crear aplicaciones, sitios web, escritos tan largos como libros o llevar a cabo cualquier otra solicitud, por sí misma, sin la necesidad de mantener una interacción constante con el usuario. La herramienta incluso puede comprobar los resultados de sus propias indicaciones y en caso de detectar que algo anda mal, solucionarlo.
Por ejemplo, si un usuario le indica a Auto-GPT que cree un recetario conformado por 20 platillos icónicos de comida china, el sistema automáticamente genera una lista de objetivos que por sí solo se encargará de ejecutar para crear el libro.
En este caso la inteligencia artificial se plantea diversos pasos
- Objetivo 1: Investigar los 20 mejores platillos de China
- Objetivo 2: Crear un libro de recetas que incluya una introducción y conclusión acerca de la comida china
- Objetivo 3: darle una estructura clara
- Objetivo 4: exportar el resultado como un archivo local
Un hecho sorprendente es que, para cada objetivo, Auto-GPT realiza un proceso diferente de acuerdo a la necesidad. Por ejemplo, en el primero, la herramienta utiliza Google para encontrar distintas recetas y seleccionar cuáles son las mejores para incluir en el libro. Posteriormente, para el resto se apoya de la capacidad de GPT-4 para enumerar las recetas, escribirlas y hacer la edición del libro.
Por ahora, es complicado utilizar Auto-GPT, ya que únicamente está disponible para programadores que cuentan con la versión de Python3.8 o superior, y posean una llave para la API de Pinecone. Además, no es accesible a través de la red, sino que requiere ser instalado en la computadora donde se utilice, sin embargo, Bruce Richards señala que está trabajando por volver esta tecnología más abierta.
Altman responde a las preocupaciones en torno a la IA generativa
A medida que continúan los avances de la inteligencia artificial generativa y surgen nuevas aplicaciones impulsadas por está increíble tecnología, por su parte el director ejecutivo y cofundador de OpenAI, Sam Altman, declaró en un evento en MIT que su compañía no está trabajando en un GPT-5 y no planean hacerlo en un buen tiempo, haciendo frente a la carta abierta lanzada por Elon Musk y otros mil líderes mundiales en referencia a las preocupaciones en torno a la falta de regulaciones.
Altman agregó que actualmente la compañía trabaja en expandir tanto la capacidad como la potencia de GPT-4, tomando siempre en cuenta las implicaciones de seguridad que puede llegar a tener el modelo. Sin embargo, el hecho de que OpenAI no trabaja en la siguiente generación de GPT, alguien más podría hacerlo.
A través de las API de GPT-4, los programadores pueden hacer uso de esta tecnología y entrenarla para diseñar sus propias aplicaciones, tal como el caso de Auto-GPT, por lo que será complicado lograr que el desarrollo de la IA generativa se pause por 6 meses, como se sugería en la carta de Musk.
Finalmente, no hay duda de que los avances de la IA generativa son impresionantes, pero a la vez son preocupantes mientras no haya regulaciones que garanticen su uso adecuado, ya que este es solo el comienzo de una nueva era para la tecnología.