Con la Declaración de Derechos de IA, el gobierno estadounidense busca trazar el camino para garantizar la seguridad y el uso adecuado de los sistemas impulsados por inteligencia artificial.
Esta mañana la Casa Blanca presentó una Declaración de derechos de IA, que tiene como objetivo crear un plan y establecer principios sobre las formas en que se deben implementar los usos de los algoritmos y sistemas impulsados por inteligencia artificial, así como las medidas de seguridad en sus aplicaciones.
La Oficina de Política Científica y Tecnológica de la Casa Blanca u OSTP, por sus siglas en inglés, declaró que “Entre los principales desafíos para la democracia hoy en día, se encuentra el mal uso de la tecnología, los datos, los sistemas automatizados y la inteligencia artificial, que amenazan los derechos de los estadounidenses.”
Con el objetivo de promover el uso adecuado de la tecnología, la OSTP trabajó con empresas de peso en la industria como Microsoft, Palantir y grupos de derechos humanos y ética de la IA, para crear una declaración de derechos, que también es una guía acerca de cinco principios fundamentales para el diseño, uso e implementación de sistemas automatizados, con el fin de proteger a los ciudadanos estadounidenses en la era de la inteligencia artificial.
Los cinco principios de la Declaración de Derechos de IA
La Declaración de derechos de IA exige que los sistemas y algoritmos de inteligencia artificial cumplan con los cinco principios que promueve el plan:
- Sistemas Seguros y Efectivos
Los sistemas impulsados por inteligencia artificial deben demostrar su seguridad y efectividad mediante una serie de pruebas y consultas con expertos antes de ser implementados.
- Protecciones de discriminación algorítmica
Las personas no deben enfrentar discriminación por parte de algoritmos sesgados y mal diseñados. Los sistemas de IA deben asegurarse de cumplir con los avances necesarios para usarse de manera justa y equitativa.
- Privacidad de datos
Los sistemas deben garantizar a quien lo usa que está protegido contra prácticas abusivas de datos a través de protecciones integradas, así mismo las personas deben dar permiso y conocer plenamente cómo se utilizarán sus datos recopilados.
- Aviso y explicación
Las personas deben ser informadas por medio de un aviso claro cuando están utilizando un sistema automatizado por IA. Los desarrolladores o cualquiera que implemente esta clase de sistemas debe explicar cómo y por qué la IA contribuye a mejores resultados.
- Alternativas humanas, consideración y respaldo
El plan además sugiere que los usuarios deberían tener la opción de optar por no participar en interacciones con un sistema de IA si así lo desean, por lo que las empresas deben tener alternativas humanas para algunos de sus servicios.
El primer paso hacia la regularización de la inteligencia artificial
Por el momento la declaración funge como una invitación a que las empresas y corporaciones privadas adopten estos principios para el beneficio de las personas, sin embargo, por ahora no están sujetas a cumplir con lo que dice la Declaración de Derechos de IA.
Aun así, expertos como Oren Etzioni, cofundador del Instituto Allen para la IA, confían que las pautas de la Casa Blanca tendrán cierta influencia en un futuro no muy lejano. “Si se implementa correctamente, un proyecto de ley podría reducir el uso indebido de la IA, mientras impulsa su crecimiento al respaldar los usos beneficiosos en sectores como la medicina, la industria automotriz, la productividad empresarial y mucho más”, mencionó Etzioni.
Mientras tanto la Casa Blanca busca predicar con el ejemplo y hacer que las agencias federales se alineen con sus propias acciones y políticas derivadas. Junto con el lanzamiento de la Declaración de Derechos de IA, la oficina presidencial anunció que ciertas agencias, como el Departamento de Salud y Servicios Humanos y el Departamento de Educación, publicarán una guía en los próximos meses para reducir el uso de tecnologías de IA dañinas o peligrosas más comunes en dichos sectores.
