La inteligencia artificial se ha convertido en el mejor aliado del sector médico, pero ¿cómo están los profesionales de esta industria aprovechando las capacidades de esta tecnología para mejorar la salud de las personas?
A medida que la inteligencia artificial avanza, continúa redefiniendo el mundo en el que vivimos, incluyendo el sector de la atención médica. El impacto de esta tecnología en la industria de la salud está permitiendo a los profesionales del sector alcanzar niveles de eficiencia, precisión y personalización que hace algunos años parecían inalcanzables.
El panorama de la inteligencia artificial en la industria de la salud
Un estudio de Presedence Research revela que, tras cerrar el 2023 con un valor de $18 mil millones de dólares, se prevé que el mercado global de la IA en el sector salud aumentará con una tasa de crecimiento anual compuesta del 37%, hasta superar los $187 mil millones para 2030.
Según los expertos este auge en el valor de la tecnología estará impulsado por el hecho de que cada vez más hospitales, consultorios e instituciones de salud están implementando soluciones impulsadas por IA, en busca de mejorar la calidad del servicio que ofrecen y la experiencia del paciente.
De hecho, según una investigación de Tencent, casi el 85% de los hospitales y compañías del sector salud ya han implementado aplicaciones médicas de IA, una cifra que seguramente seguirá aumentando a medida que esta tecnología continúe desarrollándose y volviéndose cada vez más accesible.
¿Por qué esta tecnología se ha convertido en el mejor aliado de los médicos?
La Dra. Joanna Shields, CEO y fundadora de BenevolentAI, una de las mayores empresas enfocadas en el desarrollo y la aplicación de la IA para la innovación científica, predice que para 2030, la inteligencia artificial será capaz de detectar el 80% de las enfermedades antes de que tengan un impacto crítico en los pacientes. Un logro de esta magnitud marcaría un antes y un después en la historia de la medicina e incluso de la vida humana.
Además de lo anterior, de acuerdo con una serie de pruebas realizadas por científicos de Harvard, es altamente probable que la primera persona que viva entre 150 y 200 años ya podría estar entre nosotros, principalmente gracias al auge de las aplicaciones de inteligencia artificial y otras tecnologías al área de la atención médica.
Por otro lado, la IA no solo está aumentando la eficacia de los diagnósticos y medicamentos, sino también está ayudando a mejorar la calidad del servicio que ofrecen los médicos, enfermeras y trabajadores del área de la salud.
Ciertamente la naturaleza de la inteligencia artificial no es humana, sin embargo, paradójicamente esta tecnología tiene el potencial de humanizar aún más la atención médica. Al tomar el control del análisis de datos masivos, la IA libera tiempo para que los profesionales de la salud se concentren en las personas.
No cabe duda de que la colaboración entre médicos y máquinas está transformando la industria de la salud, por lo que vale la pena repasar las principales tendencias y aplicaciones de inteligencia artificial que están redefiniendo el panorama de dicha industria.
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Diagnóstico asistido por IA
Una tendencia clave en la IA médica es el uso de algoritmos avanzados para mejorar la detección temprana de enfermedades. Las herramientas basadas en inteligencia artificial han demostrado ser más eficaces en el análisis de imágenes médicas como mamografías, radiografías y tomografías computarizadas.
Gracias a su capacidad cada vez más avanzada para el análisis de datos visuales, estas herramientas identifican anomalías sutiles que podrían ser pasadas por alto por el ojo humano, mejorando significativamente la precisión del diagnóstico y reduciendo las tasas de falsos negativos.
Qure.ai, una startup dedicada a desarrollar soluciones basadas en deep learning e inteligencia artificial generativa para mejorar la detección de diversos padecimientos, recientemente presentó una aplicación de celulares llamada qTrack, diseñada para ayudar a los doctores a detectar enfermedades respiratorias y problemas en los pulmones.
Mediante algoritmos de aprendizaje profundo, su software analiza las imágenes de rayos X de los pulmones de los pacientes y detecta con rapidez anomalías, identificando incluso los nódulos o lesiones más pequeñas, reduciendo así los tiempos de diagnóstico de los doctores y al mismo tiempo ampliando su capacidad.
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Detección temprana de enfermedades
La inteligencia artificial no solo está simplificando el análisis de los resultados de imágenes médicas y radiografías, sino también está ayudando a la prevención de enfermedades al detectarlas incluso antes de que estas se desarrollen.
Los avances de la IA han permitido la llegada de dispositivos impulsados por inteligencia artificial con la capacidad de monitorear la temperatura corporal, los niveles de oxigenación, así como su estado de salud cardíaca y pulmonar. Esto permite que los propios pacientes puedan detectar a tiempo y tratar futuros padecimientos a los que son propensos sin la necesidad de realizarse exámenes de laboratorio complejos que además pueden resultar caros.
A principios de octubre en la conferencia de HLTH 2024, la compañía de healthtech Withings presentó un dispositivo llamado BeamO, al cual describe como el “primer multiscopio 4 en 1 del mundo”
El dispositivo cuenta con un termómetro digital, un oxímetro para medir los niveles de saturación de oxígeno en sangre, un electrocardiograma para realizar lecturas de frecuencia cardíaca y un estetoscopio digital que le permite registrar los sonidos cardíacos y pulmonares del paciente mediante sensores de calor e información acústica.
A medida que el hardware que impulsa estas aplicaciones de inteligencia artificial se vuelve más accesible para más celulares y dispositivos portátiles, estos integrarán funciones más avanzadas que permitirán a las personas estar constantemente al pendiente de su estado de salud.
3. Integración de la IA en los flujos de trabajo clínicos
Una de las tendencias actuales de la inteligencia artificial en la salud es la importancia de integrar esta tecnología en los flujos de trabajo clínicos existentes para optimizar la labor administrativa y permitir la automatización de la documentación clínica.
Según una investigación de Wheel, los hospitales que han adoptado tecnologías para la escritura automática de reportes médicos han reducido hasta un 70% el tiempo dedicado a tareas de documentación, permitiendo a los profesionales concentrarse en el paciente.
Debido a lo anterior NVIDIA y Aidoc, se aliaron recientemente para desarrollar una infraestructura de inteligencia artificial que garantice que soluciones impulsadas puedan desplegarse en todos los niveles de la atención clínica sin interrupciones.
4. La IA es clave para la medicina personalizada
La inteligencia artificial está impulsando la medicina personalizada al identificar tratamientos específicos según el perfil genético y médico de cada paciente. Algunos hospitales y clínicas ya aprovechan la tecnología de machine learning y big data para analizar una enorme cantidad de datos genómicos y clínicos, para con base en estos optimizar los planes de tratamiento de cada paciente en tiempo real.
Este enfoque ya está generando mejores resultados clínicos al ofrecer de forma dirigida terapias más precisas y eficaces. Por ejemplo, la Clínica Mayo en Minnesota utiliza IA para personalizar tratamientos de cáncer basados en datos de miles de pacientes, mejorando la precisión de las dosis de medicamento que proporciona a cada persona.
5. Desarrollo de medicinas asistido por IA
La capacidad avanzada de análisis de la inteligencia artificial está transformando el proceso de descubrimiento de nuevos medicamentos, reduciendo significativamente los tiempos de investigación, prueba y desarrollo de los fármacos que antes llevaban años.
Compañías como Insilico Medicine y BenevolentAI aplican algoritmos avanzados de deep learning para identificar compuestos químicos prometedores, acortando significativamente la fase de investigación inicial y potencia la precisión en la elección de moléculas para ensayos clínicos.
Recientemente, la IA de BenevolentAI permitió identificar en meses posibles tratamientos para enfermedades neurodegenerativas que de otra manera seguramente habrían tardado años en inventarse y lanzarse.
La inteligencia artificial está marcando un antes y un después en la industria de la salud, transformando la forma en que se diagnostican, tratan y gestionan enfermedades, demostrando su gran potencial para mejorar la salud de las personas y por ende su calidad de vida.
Sin embargo, a pesar de todos sus beneficios es importante señalar que su implementación debe ser responsable, acompañada de estándares éticos, regulaciones claras y un enfoque centrado en el paciente para maximizar sus beneficios de manera segura.
