La tecnología de Amazon pretende hacer la experiencia de compra mucho más práctica, pero ha generado preocupación entre sus usuarios por la privacidad de sus datos.
Como parte de sus esfuerzos por hacer que las compras sean cada vez más prácticas, Amazon anunció esta semana que la tecnología de Amazon One, que permite a las personas pagar sus artículos simplemente escaneando la palma de su mano, estará llegando a 65 tiendas de Whole Foods en California.
La tecnología de Amazon One fue implementada por primera vez a finales del 2020 en algunas tiendas de Amazon Go. Eventualmente, en el 2021 se puso a prueba en ubicaciones estratégicas de Whole Foods en Austin, Los Ángeles y Nueva York. Sin embargo, esta es la expansión más grande hasta la fecha, con docenas de tiendas que estarán adoptando esta tecnología en los próximos meses para modernizar las compras minoristas.
¿Cómo podrás pagar con la tecnología de Amazon One?
Las tiendas de Whole Foods contarán con quioscos y estaciones digitales en las cuales los clientes pueden registrar sus datos para poder utilizar Amazon One. Simplemente deben registrar una cuenta bancaria, a la cual se cargará el cobro, un número de teléfono, escanear la palma de su mano, aceptar los términos y condiciones de Amazon y listo. Una vez completado el proceso, el cliente puede seleccionar los artículos en tienda y al irse no necesita sacar su dinero o tarjeta, un movimiento de su mano es suficiente para pagar.
El hardware de Amazon One verifica la identidad del usuario obteniendo las características únicas de la palma de su mano, identificando los detalles del área de la superficie como líneas y huellas, las características subcutáneas y hasta los patrones de las venas. Además, la tecnología utiliza el aprendizaje automático para ligar todos estos datos e identificar a sus clientes.
Clientes temen por su privacidad con Amazon One
Amazon afirma que los datos registrados en el quiosco digital no se almacenan localmente, sino que son cifrados y se envían a un servidor en la nube dedicado especialmente a Amazon One. Ahí se genera una firma única de la palma y se almacenan de forma segura. Sin embargo, esto ha generado preocupación en muchos de sus usuarios, quienes han hecho pública su inconformidad con la idea de que esta tecnología de pago permita que la empresa registre su información en la nube.
Al mantener los datos en la nube, estos quedan expuestos a ciberataques de piratas informáticos y los vuelve más accesibles a terceros, como empresas o gobierno. Recientemente se reveló que la ley permite que empresas como Amazon y Google le den acceso al gobierno a la información privada de sus usuarios sin necesidad de que exista una orden judicial. Por lo que los clientes desconfían de cómo podrían ser utilizados sus datos.
En el 2021, Amazon se asoció con AXS, una empresa dedicada a la venta de boletos, para implementar la tecnología de Amazon One en el teatro Red Rocks de Denver. Sin embargo, poco después del anuncio, fanáticos, activistas e incluso artistas como Tom Morello y Kathleen Hanna se movilizaron para exigir que abandonara el uso de herramientas biométricas tanto para pagos, como para seguridad en el venue. Mediante una carta, el colectivo expuso su preocupación de que Amazon compartiera sus datos con agencias gubernamentales y logró echar para atrás la implementación de Amazon One.
La gran cantidad de datos de sus clientes a la que tiene acceso Amazon no es nada nuevo. La empresa registra información a través de las compras en línea, los dispositivos del hogar como Alexa, Eero y Ring Video Dorbell, entre otros. Sin embargo, Amazon se enfrenta a un nevo reto con los datos biométricos.
Sin duda el gigante minorista deberá prestar especial atención y ser transparentes respecto a las formas en que los datos de sus usuarios son utilizados. Si logran que las personas confíen en ellos, la tecnología de Amazon One podría marcar la pauta hacía el futuro de las compras en el canal físico.