El nuevo SurfPerch, es un sistema impulsado por inteligencia artificial que les ayuda a los científicos a detectar los arrecifes de coral que están dañados, para restaurarlos y salvaguardar estos ecosistemas esenciales para la biología marina.
Con el objetivo de ayudar a los biólogos marinos a monitorear, proteger y restaurar los arrecifes de coral a nivel mundial, un equipo conformado por ingenieros de Deepmind y Google Research desarrolló una nueva solución de IA que aprovecha los sonidos naturales de los arrecifes para comprender el estado de salud de estos ecosistemas submarinos que frecuentemente se ven afectados por amenazas como actividades de pesca no controladas, contaminación y los efectos del cambio climático.
¿Cómo hizo Google para ayudar a conservar los arrecifes de coral con IA?
La nueva herramienta para la conservación de los arrecifes llamada, SurfPerch, fue entrenada con cientos de horas de grabaciones “eco acústicas” de audio que permitieron a los científicos “escuchar a los arrecifes desde el interior” y rastrear la actividad en la zona, con el fin de identificar patrones en los sonidos de los peces que habitan el ecosistema y así lograr detectar el “estado de salud de los arrecifes”.
Durante el año pasado, Google convocó a voluntarios de todo el mundo a que se sumaran a la iniciativa “Calling in our Corals”, un proyecto liderado por el departamento de Google Arts & Culture, mediante el cual reunieron a biólogos marinos, desarrolladores, programadores y ciudadanos para que ayudaran a monitorear la salud, evaluar la biodiversidad e identificar nuevos comportamientos en los arrecifes.
Específicamente se les solicitó a los participantes que escucharan un total de 400 horas de grabaciones de audio de arrecifes y etiquetaran cuando escucharan el sonido de un pez, o alguna irregularidad para construir una biblioteca de datos “bioacusticos” centrada en la salud de los arrecifes.
Google subrayó que abordar Calling in our Corals con una estrategia de crowdsourcing, mediante la cual recopilaron la información necesaria para entrenar SurfPech a través de las contribuciones de miles de personas que se sumaron a la causa, les permitió capturar en muy poco tiempo millones de datos bioacuáticos que a los científicos de la compañía les hubiera tomado meses analizar por sí solos.
Según el gigante de la tecnología, los resultados proporcionaron una gran cantidad de nuevos sonidos de peces que se han estado utilizando para perfeccionar SurfPerch.
“Esto nos permite analizar nuevos conjuntos de datos con mucha más eficiencia de lo que antes era posible, eliminando la necesidad de capacitación en costosos procesadores GPU y abriendo nuevas oportunidades para comprender las comunidades de arrecifes y su conservación”, declaró al respecto Steve Simpson, profesor de biología marina de la Universidad de Bristol que participó en el desarrollo de SurfPech.
¿Qué sigue para SurfPech?
Una vez que la nueva herramienta de IA de Google identifica los arrecifes con problemas, les brinda un mapa a los biólogos marinos que les muestra exactamente dónde deben enfocarse en restaurar el ecosistema.
El gigante de la tecnología se jacta de que sus primeras pruebas con SurfPerch ya están dando frutos, ayudando a proteger y restaurar una serie de arrecifes dañados y desprotegidos en Filipinas e Indonesia, sin embargo, los científicos de Deepmind y Google Research consideran que aún hay un largo camino que recorrer para resolver la problemática.
“Los arrecifes de coral cubren sólo el 0.1% de la superficie del océano, sin embargo, albergan el 25% de todas las especies marinas conocidas, por lo que es fundamental que incrementemos en gran medida nuestros esfuerzos para proteger y restaurar esta clase de ecosistemas en todo el mundo”, puntualizó el biólogo marino Ben Williams, uno de los científicos que lideró la iniciativa.