Por Redacción TNE
El cofundador de Google suele llegar a sus juntas en patines y usa su tiempo libre para practicar deportes extremos.
Sergey Brin es conocido por haber fundado Google en 1998 junto a su colega Larry Page, sin embargo aparte de ser un exitoso empresario y científico computacional, también es amante de llevar su cuerpo a niveles altos de adrenalina al practicar deportes extremos.
Nacido en Moscú en 1973, Sergey es hijo de inmigrantes que llegaron huyendo de una Rusia inestable económica y políticamente. Estudió Matemáticas y Ciencias Computacionales en la Universidad de Maryland y obtuvo su doctorado, también en Ciencias Computacionales, en Stanford, en donde conoció a Page, quien se volvió su mejor amigo y socio.
Brin, a pesar de ser uno de los hombres más ricos del mundo no es famoso por rodearse de lujos o excentricidades, sin embargo sí gasta su dinero en hobbies que representen un desafío para su mente y su cuerpo.
Por ejemplo, recientemente puso 300 mil dólares para crear una hamburguesa de carne sintética, es decir obtenida en laboratorio replicando células de músculo vacuno; al final lo consiguió, pero se veía y sabía igual que una común y corriente.
Algunas de las actividades físicas que lo distinguen es que siempre dedica su tiempo libre a elevar sus niveles de adrenalina practicando desde ski, hockey, paracaidismo o saltos en trapecio.
“Me gusta hacer una variedad de cosas acrobáticas” dijo hace algunos años en una entrevista con Business Insider.
Brin tomó clases especiales de actos circenses en Circus Center, en San Francisco, e invitó a varios empleados de Google a que lo acompañaran; además es común que llegue a la oficina o presida juntas en patines; casi siempre usa ropa deportiva y zapatos FiveFingers (tipo guantes).
Otra causa que ocupa gran parte de su fortuna es la investigación sobre el Parkinson, mal que padece su madre y al que él es predispuesto, de acuerdo a un análisis de genética.
“Sé que estoy predispuesto sustancialmente (a tener la enfermedad). Así que ahora tengo la oportunidad de ajustar mi vida para reducir las probabilidades realizando investigaciones” escribió en su blog.
Además esa probabilidad de padecer Parkinson es una motivación para hacer todo lo que quiere, ahora que tiene las condiciones físicas que sus actividades extremas le demandan.
