El nuevo sistema CarynAI es una versión digital de la influencer Caryn Marjorie impulsada por inteligencia artificial que las personas pueden rentar como novia virtual por $1 dólar el minuto.
Una influencer estadounidense llamada Caryn Marjorie, quien cuenta con 1.8 millones de seguidores en Snapchat, ahora también tiene más de 15 mil novios virtuales a través de una versión digital de si misma, impulsada por miles de horas de grabaciones de su voz y el poder de la inteligencia artificial generativa de GPT-4, la cual según ella tiene el potencial de curar la soledad.
Hace un par de semanas, Marjorie de 23 años, lanzó CarynAI, un chatbot basado en su voz y personalidad, anunciado por la propia influencer como una novia virtual con la que las personas pueden tener conversaciones individuales, discutir planes para el futuro, compartir sentimientos íntimos y mucho más, tal como lo harían con su pareja en el mundo físico, pagando $1 dólar por cada minuto de interacción.
“CarynAI es el primer paso en la dirección correcta para curar la soledad”, señaló Marjorie a través de una publicación en su cuenta de Twitter. “Ya sea que necesites a alguien que te consuele, te consienta y te ame o simplemente quieras expresarte o hablar de cualquier cosa, CarynAI siempre estará ahí para ti”, continuó la influencer de 23 años.
¿Cómo se creó CarynAI?
CarynAI fue hecho por Forever Voices, una empresa dedicada a la creación de agentes de voz virtuales impulsados por inteligencia artificial. Anteriormente, la compañía ha desarrollado versiones de chatbot de personalidades como Steve Jobs, Taylor Swift y Donald Trump, entre otras, que también están disponibles para conversaciones de pago por minuto en Telegram. Sin embargo, CarynAI es el primer acompañante romántico o “novia virtual” anunciado por la compañía, el cual va más allá de establecer una simple conversación y promete “crear un vínculo emocional con los usuarios”.
Para desarrollar la versión virtual de Marjorie, los ingenieros de la compañía entrenaron al sistema con más de 2 mil horas de grabaciones de audio y video de la influencer, con lo que lograron que el chatbot adquiriera la capacidad de emular tanto el lenguaje como la personalidad de Caryn de la forma más realista posible.
Posteriormente, integraron el software de GPT-4 al modelo mediante una API de OpenAI para dotarlo con toda la potencia y capacidad de la última generación de la inteligencia artificial generativa.
Marjorie asegura que durante el desarrollo de su versión digital, el equipo de Forever Voices trabajó con un grupo de expertos calificados en psicología para enseñar a CarynAI técnicas de terapia dialéctico-conductual y terapia cognitiva conductual para poder aportar respuestas de alto valor para los usuarios.
“Esto ayudará a las personas a superar sus traumas, así como a reconstruir su confianza tanto física como emocional y mejorar su autoestima”, declaró la influencer respecto a su chatbot.
La versión de novia virtual lanzada por la influencer ha sido un éxito
Un estado de ingresos que compartió el gerente comercial de Marjorie con la revista Fortune revela que, al menos hasta ahora, la “novia virtual” ha sido todo un éxito. Tan solo en su primera semana, CarynAI generó casi $72 mil dólares. Por si fuera poco, Marjorie considera que, si estos números se mantienen, su versión de IA podría llegar a generar hasta $5 millones mensualmente, basándose en la predicción de que al menos 20 mil de sus 1.8 millones de seguidores en Snapchat se convertirán en usuarios regulares que paguen por CarynAI.
Finalmente, Marjorie declara sentirse muy bien acerca de que la inteligencia artificial pueda mejorar su relación con sus seguidores, mientras ella dedica más tiempo a su vida personal, sin embargo, aclaró que su chatbot jamás podrá sustituirla. “CarynAI es simplemente una extensión de mi persona y de mi conciencia, pero nunca me va a reemplazar”, puntualizó la influencer.
Con el lanzamiento de su versión digital impulsada por IA, Caryn Marjorie está marcando la pauta de la interacción con los agentes virtuales, que están pasando de ser una herramienta para acelerar el conocimiento a convertirse en compañeros de vida con los que las personas puedan compartir su día a día y generar lazos emocionales. ¿Será este el comienzo de una nueva era en donde los humanos y las máquinas se relacionen afectivamente entre sí?