Este gran avance de la inteligencia artificial abre la puerta a pruebas no invasivas que pueden realizarse desde cualquier parte para detectar a tiempo y evitar padecimientos cardiovasculares.
Un grupo de científicos europeos desarrolló una inteligencia artificial capaz de predecir con precisión el riesgo de enfermedades cardíacas en una persona en menos de un minuto con un simple escaneo de los ojos. El avance podría permitir a los médicos y otros trabajadores de la salud realizar exámenes cardiovasculares de forma rápida y sencilla solamente utilizando una cámara y una computadora, sin la necesidad de análisis de sangre o controles de presión arterial, según informan los investigadores.
Alicja Rudnicka, profesora de epidemiología estadística en la Universidad de Londres y una de las principales autoras del estudio dijo que los avances encontrados en la investigación pueden ayudar a mejorar la salud cardiovascular de muchas personas e incluso salvar miles de vidas.
“Esta herramienta de inteligencia artificial podría hacerle saber a alguien en 60 segundos o menos su nivel de riesgo. Si esto se detecta a tiempo, las personas pueden hacer cambios en sus hábitos o comenzar un tratamiento para evitar que el problema se agrave” mencionó Rudnicka en una conferencia de salud en Copenhague en la que habló acerca del nuevo software de predicción de enfermedades cardíacas vía escáner de retina.
Los investigadores desarrollaron una herramienta impulsada por inteligencia artificial completamente automatizada llamada QUARTZ, un acrónimo derivado de la frase “análisis cuantitativo de la topología y el tamaño de los vasos de la retina” en inglés. El software analiza las características de las venas y arterias de la retina para encontrar patrones que indican riesgo de enfermedades cardiovasculares y accidentes cerebrovasculares con el fin de predecirlas y tratarlas a tiempo.
¿Cómo lograron predecir enfermedades cardiacas con inteligencia artificial?
La herramienta se utilizó para escanear más de 88,000 imágenes de las retinas de personas de 40 a 69 años de edad del Biobanco del Reino Unido, así mismo de 7,400 participantes de Epic-Norfolk, el estudio europeo de investigación prospectiva sobre el cáncer que tenían entre 48 y 92 años de edad.
Posteriormente los científicos hicieron un análisis del seguimiento de la salud de todos los pacientes durante un promedio de siete a nueve años. Los investigadores encontraron que en los hombres el ancho, la curvatura y la variación del área de las venas y arterias en sus retinas son factores determinantes para detectar una enfermedad circulatoria. Mientras que, en las mujeres el área y el ancho de la arteria y así como la curvatura y la variación del ancho de la vena contribuyen a la predicción del riesgo de padecimientos cardiovasculares.
Esta información les permitió a los investigadores desarrollar modelos de predicción de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares basándose en factores como el ancho, el área de los vasos y el grado de curvatura de las arterias y venas que se encuentran en la retina.
QUARTZ fue cargada con todas las imágenes junto con los modelos de predicción desarrollados por los investigadores y mediante su capacidad de machine learning aprendió a analizar múltiples datos de una imagen de la retina de una persona para relacionarlos con signos de una enfermedad cardíaca y producir un perfil de riesgos en menos de un minuto.
Los científicos que desarrollaron esta tecnología confían en que tiene el potencial de mejorar significativamente la vida de miles de personas, ya que las enfermedades cardiovasculares y los accidentes cerebrovasculares son dos de las principales causas de problemas de salud y muerte en todo el mundo y la predicción de riesgos habilitada por la IA es totalmente automatizada, de bajo costo, no invasiva y puede llegar a más personas, ya que no requiere de muestras de sangre o análisis que pueden resultar costosos para algunos pacientes.