Por Redacción TNE
Evita acciones que generan consumidores molestos y su poder de terminar con tu marca en un instante.
¿Qué tienen en común compañías como Apple, Amazon o Costco? Sí, tienen mucho éxito, consumidores y ganancias de millones de dólares, pero lo más importante es que todas coinciden en que siempre están enfocadas en brindar una gran experiencia a sus clientes.
Hasta hace poco la política de devolución de Amazon contemplaba remplazar por completo un producto si no era de la entera satisfacción del consumidor; Costco también cuenta con reglas muy laxas en este sentido para que el usuario se sienta como en casa, mientras que ir a una tienda de Apple y ser atendido por su personal “hipercapacitado” es como estar hablando con el mismo Steve Jobs.
En general lo que se puede aprender de estas marcas es que su cliente siempre tiene la razón; bajo esta filosofía han conseguido crear largas y duraderas relaciones con éstos, quienes al final son los que llevan al éxito o al fracaso una empresa, ¿cómo imitarlos?
1. Encuentra el personal adecuado.
Este paso es fundamental para conseguir tu meta de dar el mejor servicio al cliente porque tus empleados son los que dan la cara y están en contacto directo con tus usuarios. Capacita a tus colaboradores, enséñales a resolver problemas, muéstrales cómo ganarse la confianza de los visitantes y motívalos a ser el mejor rostro de la compañía.
2. Conoce a tus clientes.
Simple, no puedes darles la mejor experiencia de compra si no sabes qué les gusta o qué necesitan. Apóyate de las herramientas tecnológicas disponibles en el mercado para crear perfiles de tus compradores, de esta forma sabrás qué es lo que siempre debes tener y qué debes cambiar. Además no te olvides de permanecer al pendiente de lo que dicen de ti en el buzón de quejas o las redes sociales para dar el seguimiento adecuado.
3. Incentiva.
Dar recompensas por la lealtad y fidelidad de las personas a tu marca es la mejor forma de mantener por un largo periodo de tiempo una relación comercial. No dudes en crear promociones o dar obsequios a aquellos consumidores que siempre están contigo, seguro ellos te lo van a agradecer.
Un excelente servicio al cliente es un activo intangible de gran valor que en un corto plazo se convertirá en ganancias para tu empresa. Recuerda que hacerse de un nombre en la industria puede tomar años y mucho trabajo, pero terminar con esa buena reputación toma sólo lo que un cliente insatisfecho tarda en poner su queja y hacerla pública.