Invertir en tus colaboradores para mejorar sus capacidades traerá un beneficio mutuo: los ayudarás a desarrollarse profesionalmente y ellos potenciarán tu negocio.
Por Redacción TNE
Al momento de realizar un proyecto dentro de la oficina, muchas personas tienden a enfatizar sus habilidades “duras”, conocimientos específicos y habilidades requeridas para su puesto en particular. Estas típicamente se pueden medir con claridad y por supuesto que son importantes. Sin embargo, también es necesario resaltar las destrezas “suaves” (conocidas como soft skills en inglés), que en ocasiones harán la diferencia entre los colaboradores con niveles de conocimiento similares al momento de efectuar el mejor trabajo posible.
Estas habilidades son mucho más difíciles de definir, ya que recaen en el nivel de capacidad de relación interpersonal con el que cuenta cada persona. Estas no sólo dejan a cada uno desarrollarse mejor dentro de su ámbito y carrera profesional, además les permitirán interactuar mejor con clientes, proveedores, supervisores, entre otros, lo que traerá potenciales grandes beneficios a la empresa.
¿De qué estamos hablando?
Antes de inculcar nuevas capacidades, obviamente primero necesitas conocer específicamente a qué se refieren las soft skills. Cuando estés buscando crear un nuevo equipo de trabajo o simplemente empoderar al que ya tienes, enfócate en potenciar varias prácticas específicas.
Actuar como un team player: significa no solamente ser cooperativo, sino también mostrar fuertes habilidades de tomar el mando cuando sea necesario y hacerse cargo de una situación, guiando a los demás si tienen dificultades.
Flexibilidad: es algo extremadamente valioso, ya que las personas que pueden adaptarse a cualquier situación son confiables, porque sabes que no importa lo que les arrojen, sabrán sobrellevarlo.
Comunicación efectiva: es primordial para cualquier trabajo. Esto implica articular claramente una idea, ser un buen oyente y usar el lenguaje corporal apropiado.
Resolución de problemas: ser capaces de tomar decisiones rápidas es un rasgo importante a tomar en cuenta.
Aceptar la retroalimentación: cada persona no sólo debe aceptar los comentarios que se le hacen, sino también aplicarlos para fomentar su crecimiento personal y profesional.
Confianza en uno mismo: es importante tener siempre el conocimiento y las habilidades para respaldar la seguridad personal. Al ser seguros y capaces, personas externas a la organización creerán en lo que se está diciendo.
Pensamiento creativo: poder encontrar soluciones únicas o alternativas es invaluable; impulsa la innovación y aumenta la eficiencia.
¿Cómo puedo incitar esto?
Un gran primer paso para crear una cultura en la que abunde la comunicación, el networking y el design thinking, es asegurarte de tener dichas capacidades tú mismo o fomentarlas dentro de la oficina. La creatividad, autenticidad, visión y la búsqueda del crecimiento son las cuatro características principales para realizar un liderazgo transformacional efectivo.
· Inspira la motivación y la autosuperación: ofrece herramientas educativas aplicables tanto al rol que desempeñan los colaboradores como afines a sus carreras profesionales. Las empresas pueden ayudar a su fuerza laboral a identificar y cumplir sus objetivos, cosechando los beneficios de un equipo más dinámico, capaz y conocedor.
No fuerces a la gente a participar en dichas tácticas, más bien ofrece incentivos a cada persona que se vea ávida de obtener nuevos conocimientos. Puedes realizar una rifa cada dos meses con todos los que hayan decidido aprovechar los beneficios que les otorgas, no tiene que ser algo grande, con una tarjeta de regalo o una comida es más que suficiente.
· Haz que colaboren las diferentes áreas: los equipos multifuncionales orientados a proyectos son cada vez más importantes para las empresas que quieren ser competitivas.
Muchas de las nuevas modalidades de trabajo (como las oficinas de coworking, por ejemplo) hacen que grupos pequeños de personal trabajen juntos con frecuencia, buscando siempre una segunda opinión de otro departamento. Esto ayudará a dar un punto de vista más amplio, lo que puede dar paso a descubrir algo de lo que usualmente no se darían cuenta.
Programa sesiones que conjunten distintos equipos dentro de la organización. Las personas tienden a atraer a aquellas que son como ellos, incita una participación más diversa a fin de enriquecer mentes.
· Alienta la creatividad: cerca del 80% de las organizaciones en Estados Unidos han mencionado que tienen dificultades para encontrar personas creativas e innovadoras.
Para superar este obstáculo, tu empresa debe considerar la adopción de una cultura de trabajo más maleable que les permita a los trabajadores ejercitar sus músculos creativos.
Por ejemplo, si tu modelo lo permite, ofrece horarios flexibles que promuevan la creatividad al permitir a los empleados trabajar cuando estén en su horario más productivo. Otra opción es dar a los colaboradores 15 o 20 minutos de descanso en el que puedan intercambiar ideas. Recompensa a quienes compartan sus hallazgos.
· Libérate del poder: sé un coach, no un solucionador de problemas. Si no permites a los miembros de tu equipo actuar por su cuenta y resuelves cada conflicto que se les presente, nunca aprenderán y por consecuencia, no recibirán valiosas lecciones.
Cuando se presente un inconveniente y acudan a ti, pregunta “¿qué has intentado hasta ahora?” Sugiere recursos para que investiguen por sí mismos y pídeles que vuelvan contigo si siguen teniendo problemas.
La mejor manera de desarrollar las habilidades que toda persona necesita para prosperar en equipos ágiles y de colaboración, es exponerlas a diferentes perspectivas, nuevas formas de pensar y diversos grupos con los cuales normalmente no se juntarían. Trabaja con ellos a fin de abordar problemas por distintos ángulos y así todos crecerán de forma individual y como empresa.
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