La globalización y los cambios tecnológicos están impactando en la competitividad de las empresas y en la productividad de los empleados.
En un mundo acelerado que se transforma constantemente, las grandes preguntas radican en cómo los cambios en el entorno, la relación con las nuevas tecnologías, el uso de las redes sociales, la penetrante globalización y movilización, así como la variabilidad económica de los países en desarrollo, pueden influir en la gestión del talento en las organizaciones. Comprender esta panorámica permitirá anticiparnos a los hechos y sus consecuencias dentro de las organizaciones.
Quienes administran el talento deben conocer las variables externas capaces de afectar a las compañías en los próximos años, así como los procesos o áreas sujetas a transformaciones trascendentales y dinámicas de la fuerza laboral que modificarán su gestión.
Serán muchos los cambios, pero es importante desglosar cada uno. Vale la pena considerar las nueve tendencias que influenciarán en la administración del talento en las organizaciones:
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La modalidad de aprendizaje social desplazará a otros métodos dentro la empresa
Habrá un mayor énfasis en el autodesarrollo para obtener conocimientos donde las tecnologías sociales influirán en el acontecer diario de los empleados y en la interacción mediante diversas plataformas, canales y contenidos. Además será relevante la disposición para compartir la información, pues será la ventaja competitiva en un futuro no muy lejano donde se enfrentará la incertidumbre constante del entorno.
Esta tendencia lleva a un proceso formativo en red, ubicuo y atemporal, trascendiendo los límites organizacionales, empoderando al empleado, otorgándole la responsabilidad de su propio crecimiento profesional. Así, éste tendrá un mayor control del proceso, tanto desde lo que refiere a la designación de los contenidos como a los objetos de aprendizaje con los cuales trabajará. Entre los sistemas más populares se encuentran los Entornos Personales de Aprendizaje (EPA) y los Cursos Online Masivos Abiertos (MOOC, por sus siglas en inglés).
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Arquitectura organizacional basada en redes de talento
Hoy en día, los silos funcionales en las empresas fracturan la gestión del conocimiento. Por ello, se están creando nuevas redes de talento, complementarias a una estructura organizacional tradicional, potencializadas por las tecnologías sociales para administrar el know how. Dichas redes se desplegarán transversalmente en todos los ámbitos de la organización en términos de ecosistemas de innovación, comunidades de práctica y grupos de discusión, nutriéndose de la inteligencia colectiva, derivada del aporte creativo de directivos, líderes, empleados, clientes, competidores y proveedores.
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Líderes transformadores como gestores de comunidades
Las redes sociales corporativas serán el marco idóneo para el desarrollo de grupos, caracterizados por modelos organizacionales de liderazgo distribuido entre éstos y no en áreas o departamentos. El liderazgo único y visionario dará paso a uno más itinerante; habrá tantos líderes como comunidades y éstas serán la base en la gestión de la organización.
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La organización con apertura: el empleado knowmad
Las empresas se vuelven líquidas, colaborativas, innovadoras, más abiertas; conversarán y generarán sus propios contenidos y transferirán conocimiento. Esto fundamentado en los knowmads, profesionales nómadas interesados en generar valor mediante el dominio profundo de temas específicos, sin colaborar a tiempo completo en la organización, la cual albergará, gestionará e integrará a estos expertos sin interés de jubilarse, con expectativas y valores diferentes.
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De la gestión del conocimiento a la inteligencia colectiva
La complejidad del ecosistema y la frecuencia de los cambios económicos dinamizarán la gestión de los entornos de la economía colaborativa, así como la inteligencia colectiva. Entender esta última implicará liberar tareas y responsabilidades, fomentando la toma de decisiones grupales.
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La retribución del capital social como diferenciador
La generación de valor en el futuro derivará del social networking; el profesional que desconozca cómo hacer determinada actividad, pero cuente con los contactos necesarios para acceder a la persona u organización capaz de realizarla, aportará un valor sin precedentes. Las redes sociales redefinirán los nuevos modelos del valor del capital social, es decir, las relaciones profesionales, el conocimiento e información a las que una persona tiene acceso.
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Nuevos entornos de trabajo desde casa, movilidad y nuevas tecnologías
Se apostará por invertir en tecnologías digitales con el fin de promover el trabajo colaborativo en red. Se implantarán medios sociales, se permitirá el uso de dispositivos móviles, facilitando el acceso a datos y aplicaciones en la nube para compartir el conocimiento, aprovechando la inteligencia colectiva de la organización extendida (fuera de los muros empresariales).
Se explora la aplicación a corto plazo de computadoras que aprenden y aplicaciones de inteligencia artificial para generar nuevas ideas e hipótesis, acelerando el flujo de conocimiento de la empresa.
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Las comunidades como arquitectos de conversaciones en la organización
Las áreas de relaciones internas dejarán de administrar la comunicación y se convertirán en diseñadoras de conversaciones (community manager), evolucionando como generadores de tendencias y gestores de aprendizaje social. Estarán integradas por profesionales internos que con ayuda de la tecnología, conocen, monitorean las comunidades y los conocimientos que éstas producen.
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La apuesta por el talento en los nuevos modelos de organización
En un mundo hiperconectado, las fronteras desaparecen y el capital humano se mueve. Las empresas deberán detectar y atraer talento crítico, mostrando capacidad para comprometerlo al tiempo que favorecen sus propios valores y se atienden sus necesidades. También requieren de aprender a gestionar la diversidad y la inclusión, logrando que las personas se focalicen hacia la contribución de un proyecto común impregnado de culturas, intereses y procedencias diversas.
El cambio ya está ocurriendo, es muy probable que el mercado laboral ya se haya sacudido por una dramática discontinuidad, marcando un antes y después en las prácticas de gestión del talento como hoy las conocemos.
La transformación representará un irreversible punto de quiebre para los profesionales, cuyas carreras actualmente sobreviven con extraña tranquilidad y frescura.
Las empresas líderes que apuesten fuerte por el capital humano como estrategia, marcarán diferencias abismales respecto al resto. Esto motivará el despliegue de mecanismos de supervivencia, donde destacarán aquellas organizaciones capaces de adaptarse a un entorno inconstante, más complejo, competitivo y volátil que el actual.
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