Si vas a emprender en e-Commerce evita caer en trampas que pongan en jaque el crecimiento de tu nueva empresa. Ten claro lo que debes prevenir y cuáles son las acciones por tomar en cuenta.
Iniciar un negocio es el sueño de muchos, basarlo en línea se vuelve una necesidad para tener visibilidad frente a un amplio mercado. Sin embargo, la emoción y una planeación débil puede llevar a cometer errores comunes en un e-Commerce, y que generalmente muchos de estos se dan al iniciar.
Evitar lo anterior requiere de un enfoque pragmático y de un plan que permita tener muy claras las prioridades a fin de que el negocio se estabilice en los primeros meses de vida y pueda ponerse en ruta del crecimiento.
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Es posible cometer diversos errores comunes al emprender un negocio de e-Commerce. Vale la pena comprenderlos con más detalle, así evitarás estresarte y entrar en pánico cuando se presenten y tengas que resolverlos.
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No tener un mercado y nicho objetivo
Más allá de identificar quiénes son los principales competidores, es fundamental saber cómo está la oferta y la demanda en el mercado. De esta manera, podrás establecer la rentabilidad del negocio porque tendrás claro cuáles serán los costos y ganancias que obtendrás, además de considerar otras métricas.
Por otro lado, si no sabes quiénes son tus consumidores tampoco sabrás si tus productos o servicios son lo que ellos necesitan o si son los más adecuados. Incluso podrías tener clientes que son de tu nicho, pero aun así no estarán interesados, ya que no necesariamente requieren determinada oferta. Por lo tanto, date a la tarea de definir el perfil de tus usuarios y sus necesidades, de tal manera que puedas adecuar tu oferta según sus requerimientos.
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Presentar beneficios muy genéricos y en una oferta amplia
Una de las malas decisiones que se toman es tener una oferta amplia, lo que además genera problemas de logística e inventario. A esto se suma que no se puede satisfacer los gustos de todos los consumidores, pensar que es posible lleva a querer abarcar mucho y apretar poco.
Por otro lado, es importante evitar mostrar generalidades al describir los beneficios de los productos, como por ejemplo “reducir el estrés” o “relajarte más”, porque suena tan amplio y vago que no conectarás con fuerza con tu audiencia. Necesitas brindar más detalles a través mensajes poderosos que, en el mejor de los casos, cuenten una historia con la que los clientes se sientan identificados.
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Pensar que es una fuente de ingresos automática
Si bien es posible que muchos procesos se puedan automatizar, ya que se depende de la inteligencia artificial u otras tecnologías exponenciales para su operación, puede crear la ilusión de que las ventas se generarán solas con una mínima o nula intervención de los equipos comerciales.
A pesar de que es cierto que es posible ofrecer auto compras y algunos emprendedores digan que solo trabajan unas horas mientras obtienen ingresos al dormir, esto no sucede en negocios de e-Commerce durante sus primeros años. Antes se requiere una estrategia para obtener ganancias e inmediatamente reinvertirlas para continuar con el crecimiento del negocio.
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Olvidar el servicio al cliente
Por más que se trate de un negocio online, es necesario un contacto con los consumidores. Pensar que ellos solo entrarán al sitio y realizarán su compra sin más, es un error; de alguna manera buscan confirmar que están tratando con personas, aunque sea vía remota.
A fin de atenderlos adecuadamente, resulta esencial contar una página dedicada de “Contacto”. Los usuarios deben ingresar con facilidad e identificar correos y teléfonos a los que puedan comunicarse para aclarar cualquier duda o resolver algún problema. Incluso no se puede descartar la posibilidad de integrar un sistema de chatbots con la intención de canalizar los mensajes y darles pronta respuesta con la ayuda de un ejecutivo comercial.
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Intentar hacerlo todo tú
Una empresa, por más pequeña que sea, depende de tareas especializadas que no necesariamente las puede hacer el fundador, especialmente si no cuenta con la capacitación. No hay que darse el lujo de caer en un exceso de confianza que ponga en jaque la continuidad.
Por ende, es importante reconocer que gestionar un negocio de comercio electrónico implica dominar ciertas habilidades y conocimientos. De tal manera que vale la pena contar con socios que integren estos skills para hacerlo crecer y apoyarse unos a otros cuando surjan situaciones inesperadas.
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Evadir la ciberseguridad
Los ataques cibernéticos están a la orden del día y hay quienes pueden pensar que estos jamás afectarán a sus empresas. Al contrario, este es un asunto que debe tomarse en serio, sobre todo cuando además la información de los clientes está en peligro, lo que, en caso de ser vulnerada, genera desconfianza y daña la reputación de la marca.
En consecuencia, es fundamental asegurar el sitio de internet con certificados SSL y mediante la instalación de software que proteja contra el fraude, entre otras soluciones. Esto debe ser una prioridad para evitar filtraciones que impacten en las operaciones, evitando demandas y multas por falta de cumplimiento.
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Estos son algunos de los errores comunes que se cometen en un e-Commerce al iniciar. Tenlos en mente para evitarlos a toda costa y mantener el rumbo del emprendimiento enfocado con la intención de hacerlo crecer.