Se espera que en el 2025 tanto la cantidad de ciberataques como la complejidad de los mismo seguirá aumentando, por lo que es sumamente importante para las empresas conocer bien a qué se enfrentan y cómo pueden protegerse de estas malas prácticas.
A medida que la tecnología avanza y el mundo se vuelve cada vez más dependiente de los sistemas digitales, aumentan significativamente las amenazas a nuestra privacidad y seguridad. Es por eso que este 2025, la industria de la ciberseguridad se enfrentará a desafíos sin precedentes, con ataques más sofisticados y un panorama tecnológico que demandará soluciones más robustas, la pregunta es: ¿están las empresas, gobiernos y usuarios preparados para lo que se avecina?
El panorama de la industria de la ciberseguridad en el 2025
Según los datos de Statista, el mercado de la ciberseguridad está proyectado en alcanzar un valor de $203 mil millones de dólares a nivel global en 2025 y crecerá a una tasa anual del 7.58% entre este mismo año y el 2029.
Además de lo anterior, se estima que el gasto promedio por empleado para cubrir las necesidades de ciberseguridad a nivel mundial llegará a los $56.50 dólares en 2025 y por si fuera poco, según los expertos los servicios de seguridad cibernética dominarán el mercado con un volumen proyectado de $103.10 mil millones de dólares.
Estas cifras reflejan la importancia de prepararse para un entorno digital cada vez más complejo y peligroso, por lo que vale conocer las principales tendencias y predicciones de ciberseguridad de este año que apenas comienza.
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Ataques de ransomware y el auge del RaaS
Un informe publicado por Statista que reúne la opinión y el testimonio de cientos de líderes de ciberseguridad de todo el mundo reveló que casi el 80% de las organizaciones a nivel mundial fueron víctimas de al menos un ataque de ransomware en el 2024 y desafortunadamente para las empresas se prevé que la situación empeore este año.
Según los expertos, el ransomware continuará siendo una de las mayores amenazas cibernéticas en el 2025, principalmente con el “Ransomware as a Service” (RaaS) ganando popularidad. Este modelo permite a ciberdelincuentes sin conocimientos técnicos lanzar ataques mediante otros hackers especializados.
Se cree que esta situación obligará a las empresas a fortalecer sus medidas de protección y desarrollar planes de continuidad y recuperación anti desastres. Frente a esta gran amenaza, los gobiernos y el sector privado deberán trabajar juntos para mejorar la resiliencia cibernética, estableciendo alianzas estratégicas y compartiendo información valiosa sobre amenazas emergentes.
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La IA y la automatización revolucionan la ciberseguridad
La inteligencia artificial y el machine learning seguirán consolidando su papel como herramientas clave para la detección, prevención y respuesta a amenazas cibernéticas durante el 2025. Ahora, gracias a los avances de la IA, esta clase de sistemas automatizados no solo serán capaces de identificar ataques en tiempo real, sino también de anticiparse a nuevas amenazas.
La capacidad avanzada de los sistemas para la detección de anomalías mediante el análisis de enormes bases de datos para identificar patrones inusuales, se complementará con bots cada vez más inteligentes de respuesta automática que neutralizarán amenazas sin intervención humana. Los especialistas afirman que estos avances ayudarán a reducir los tiempos de inactividad y al mismo tiempo a mitigar en gran medida los daños causados por los ciberataques.
Por otro lado, a pesar de lo anterior es importante subrayar que el avance de la IA también está generando preocupaciones en el sector, ya que así como los proveedores de seguridad están aprovechando esta tecnología para reforzar sus soluciones de ciberseguridad, los hackers lo están haciendo para fortalecer sus ataques.
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Vulnerabilidades en dispositivos IoT
Con más de 30 mil millones de aparatos conectados a IoT (internet of things) en todo el mundo proyectados para este 2025 que apenas comienza, esta clase de dispositivos representan uno de los puntos más vulnerables en las infraestructuras tecnológicas globales, ya que la interconectividad de estos artefactos con tecnología de punta ha abierto las puertas a los hackers a nuevos métodos de ataque como “Denegación de servicios” que ponen en jaque la seguridad y privacidad de todos sus usuarios.
Para abordar estos desafíos, los desarrolladores y proveedores de tecnología para el hogar como los asistentes digitales Alexa o Google Home, así como de otros electrodomésticos inteligentes deberán implementar estándares de seguridad más rigurosos, como la autenticación multifactor y la encriptación de extremo a extremo.
Algunos expertos consideran que para lograr combatir esta problemática además se necesitará una infraestructura de seguridad unificada que proteja tanto a las empresas como a los usuarios de esta tecnología.
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El metaverso bajo ataque
Los expertos predicen que en el 2025, el metaverso tendrá un importante auge impulsado principalmente por los avances en materia de inteligencia artificial y realidad virtual. A su vez esto traerá nuevos riesgos cibernéticos.
A medida que este espacio virtual se populariza, se cree que este año, muchos hackers se enfocarán en el robo de activos virtuales, como NFTs y criptomonedas, así mismo en manipular interacciones dentro de mundos virtuales mediante fraudes.
Un reporte de la consultora Kaspersky sugiere que los ataques en plataformas de realidad virtual podrían incluir la suplantación de identidad de avatares para realizar fraudes o la distribución de malware mediante descargas de archivos aparentemente legítimos.
Para contrarrestar estas amenazas, en el 2025 se deberían desarrollar políticas de seguridad específicas para el metaverso, incluyendo mecanismos de verificación de identidad, controles sobre el comportamiento de los avatares y protección de datos personales. Estas medidas serán esenciales para evitar fraudes y violaciones de privacidad en entornos virtuales.
Por su parte, las empresas como Meta y Microsoft, entre otros proveedores de este tipo de servicios deberán realizar inversiones significativas en herramientas de ciberseguridad para proteger a sus usuarios dentro de estos espacios digitales.
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Mayor protección de infraestructuras críticas
Las infraestructuras críticas, como plantas de energía, hospitales y sistemas de transporte, serán objetivos cada vez más frecuentes de ciberataques en 2025. El ataque que sufrió United Healthcare en marzo del 2024, mismo que paralizó los sistemas de atención médica en Estados Unidos dejando temporalmente a millones de personas sin acceso a sus medicamentos, encendió las alarmas en el sector.
En su momento, Andrew Witty, CEO de la compañía declaró que es posible que aproximadamente un tercio de los ciudadanos hayan sido afectados por el ataque a Change HealthCare, marcando un importante precedente del alcance que puede llegar a tener y los problemas que pueden ocasionar un incidente de este tipo.
Para enfrentar estos riesgos, los gobiernos y empresas deberán invertir en la modernización de sistemas de seguridad y en la implementación de estrategias de defensa en profundidad. Esto podría incluir simulacros de ataques, como los que ha comenzado a realizar la Unión Europea en 2024 para evaluar la resiliencia de sus infraestructuras críticas.
Adicionalmente, se anticipa que a lo largo de este año se desarrollen nuevas normativas globales que exigirán auditorías de ciberseguridad más rigurosas en los sistemas que controlan infraestructuras críticas.
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Fortalecimiento de la seguridad en la nube
Con la migración continua de las empresas a la nube, proteger datos en plataformas como AWS, Microsoft Azure y Google Cloud será crucial. En 2025, se espera que muchos atacantes apunten a vulnerabilidades en la gestión de identidades, lo que hará que soluciones como Zero Trust y la autenticación multifactor se conviertan en estándares de la industria.
Además de lo anterior, se espera que la integración de blockchain para cuestiones de autenticación, aunado a la implementación de IA para la detección de amenazas ayudarán a mejorar la seguridad en la nube en el 2025. Según los expertos, las tecnologías basadas en “contratos inteligentes” podrían ser clave para automatizar procesos de autorización, asegurando que solo usuarios legítimos accedan a información crítica.
Sin embargo, las brechas de seguridad en este ámbito podrían tener consecuencias devastadoras, por lo que las organizaciones deberán adoptar modelos de seguridad más robustos, donde cada solicitud y acceso sea verificado y validado.
El 2025 marcará un punto crítico para la ciberseguridad, por lo que la colaboración entre empresas y gobierno, así como la innovación continua serán esenciales para garantizar la seguridad en un mundo digital cada vez más interconectado.
A medida que las amenazas cibernéticas evolucionan y los hackers continúan fortaleciéndose, la adopción de tecnologías como la IA y la protección de infraestructuras críticas sin duda serán fundamentales para mitigar los estragos de los problemas de ciberseguridad en este año que apenas comienza.
Oscar Alejo, Especialista en transformación digital de ABBA Networks